Saturday, November 29, 2014

Arce: Hay nerviosismo y preocupación en Chile por demanda marítima

El Procurador General del Estado, Héctor Arce, afirmó que hay nerviosismo y preocupación en autoridades chilenas, puesto que constantemente cometen errores cuando hacen referencia a la demanda marítima boliviana.

Las declaraciones del Procurador se dan a propósito de una columna de opinión del canciller chileno Heraldo Muñoz publicada el pasado 25 de noviembre en el periódico El País de España, donde señala que la demanda marítima afecta de raíz al Tratado de Paz y Amistad de 1904.

Además, en la misma sostiene que Chile formuló propuestas a Bolivia para una salida marítima, pero éstas no tuvieron éxito por falta de voluntad de las autoridades.

"Obviamente hay una suerte de nerviosismo, de preocupación constante que los lleva a una serie de medidas más que todo mediáticas, diplomáticas, un poco desesperadas ante creo yo la certeza y la corrección y la pertinencia de la demanda que ha presentado Bolivia", manifestó Arce a la ANF.

Arce no descartó que las constantes declaraciones de autoridades chilenas, en la que reconocen que Bolivia tiene derecho a una salida al mar, pudieran ser utilizadas por el equipo jurídico para fortalecer la demanda que está en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.

La autoridad reiteró que la demanda marítima contra Chile ante la CIJ, no implica una revisión del Tratado de 1904, pues por el contrario pide a la Corte obligar al vecino país a negociar con Bolivia un acceso soberano al mar.

Ayer, la Cancillería boliviana, a través de un comunicado, invitó cordialmente a Chile a que por respeto a la CIJ y al Sistema Internacional de Naciones Unidas que representa, espere a que sea esta instancia la que se pronuncie sobre la competencia de la demanda presentada por Bolivia.

El pasado 7 de noviembre, Bolivia presentó ante la CIJ la respuesta a la excepción preliminar de incompetencia planteada por Chile y que objeta que la CIJ aborde la demanda marítima, arguyendo que la petición boliviana trata en el fondo de vulnerar el Tratado de Paz y Amistad de 1904.

Bolivia presentó el 24 de abril de 2013 su demanda ante la CIJ.
Chile inició una guerra en 1879, que derivó en la invasión a Antofagasta. A consecuencia de ello, Bolivia perdió 120.000 km2 de territorio y más de 400 km de costa.

INSISTE CON QUE BOLIVIA TIENE ACCESO AL MAR CHILE RESPONDE A LA POSICIÓN DE MUJICA

El uruguayo dijo que el país debe tener de alguna manera una salida al océano.

Tras las declaraciones del presidente uruguayo José Mujica al diario cruceño El Deber en torno de que Bolivia debe tener "de alguna manera" una salida al mar, el canciller chileno Heraldo Muñoz salió al paso para dar una respuesta al respecto.

"Es un problema histórico que tiene Bolivia, soy consciente de la dificultad que tiene Bolivia, que no la vamos a superar de inmediato, será con el tiempo. Los pueblos no pueden vivir anacrónicamente (...) De alguna manera Bolivia tiene que salir al mar y si no puede salir por allá, tiene que salir por acá. Mientras tanto, seguir luchando por lo otro. Éste es un problema que tiene que verlo el Mercosur. Bolivia tiene que pedir ayuda al Mercosur para tratar este problema".

La posición chilena. De acuerdo con la agencia de noticias Efe, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, replicó ayer al presidente uruguayo, José Mujica, que llamó al Mercosur a ayudar a Bolivia a obtener una salida al mar, y aseguró que ese país puede usar los puertos chilenos para llegar al océano Pacífico, aunque sin soberanía.

"Es necesario tener conciencia de la realidad y ésta es que Bolivia goza de acceso al mar. No tiene acceso soberano, pero que tiene acceso al mar es absolutamente indudable", dijo Muñoz en una rueda de prensa después de reunirse con excancilleres para hablar de la demanda boliviana.

El ministro de Relaciones Exteriores chileno explicó ayer que el tratado que su país y Bolivia firmaron en 1904 tras la guerra de fines del siglo XIX en la que se enfrentaron, entregó al país vecino "el más amplio y libre tránsito por los puertos chilenos".

Según Muñoz, Bolivia tiene puestos de aduanas en los puertos de Chile, almacenaje gratuito por un año para las importaciones y de 60 días para las exportaciones y goza de beneficios tributarios que no tienen los empresarios chilenos.

No dijo, sin embargo, que su país incumple sistemáticamente, las cláusulas de ese acuerdo binacional de 110 años.

El Canciller dijo además que Chile está dispuesto a conversar con Bolivia todos los temas de interés bilateral, menos de la demanda que La Paz presentó en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para que ese tribunal obligue a Chile a negociar una salida soberana al océano Pacífico.

"De manera unilateral (los bolivianos) han decidido demandarnos en un tribunal, y en un tribunal uno se defiende".

El Gobierno chileno estima que a mediados del año que viene se realizarán los alegatos orales para determinar la competencia de la CIJ para tratar el tema central de la demanda, luego que Chile presentara objeciones preliminares en julio pasado.

Hasta ese momento, los abogados chilenos y los agentes ante la CIJ sostendrán varios encuentros con los juristas internacionales que representan a Chile, precisó Muñoz.

El tratado constitutivo del MERCOSUR establece "la libre circulación de bienes, servicios y factores productivos entre países, el establecimiento de un arancel externo común, la libre circulación de personas y la adopción de una política comercial común, la coordinación de políticas macroeconómicas y sectoriales entre los estados partes y la armonización de las legislaciones para lograr el fortalecimiento del proceso de integración regional".


5 países miembros plenos tiene el Mercosur: Argentina, Uruguay, Brasil, Venezuela y Paraguay.

Bolivia solicita a Chile que ‘por respeto’ espere el fallo de la CIJ 



Bolivia pidió ayer a Chile que “por respeto” a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) espere el fallo que asuma esta instancia sobre su competencia respecto de la demanda interpuesta por La Paz en 2013 y que busca que Chile negocie “de buena fe” una salida al Pacífico.

La Cancillería boliviana, mediante un comunicado, lanzó este pedido en medio de una fuerte campaña mediática de Chile en la que se asegura que el país pretende desconocer el Tratado de límites de 1904 y así el sistema global que regula estos pactos. El extremo, negado por las autoridades bolivianas, fue ratificado ayer por escrito.

Santiago presentó en julio un recurso de excepción preliminar de competencia para que la CIJ no conozca el caso planteado por Bolivia y así paralizó el proceso de fondo.

Justicia. “Bolivia invita amistosamente a la República de Chile a que por respeto a la Corte Internacional de Justicia y al Sistema Internacional de Naciones Unidas que representa, se espere a que sea ésta la que se pronuncie sobre la competencia de la demanda presentada por Bolivia”, señala el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores y Cultos”.

El 25 de noviembre, el canciller de Chile, Heraldo Muñoz, en una columna de opinión denominada Detrás de una demanda boliviana publicada en el diario español El País se refirió al diferendo que mantienen ambos países. “Bolivia sostiene que su demanda no toca el Tratado de 1904; pero lo cierto es que aun cuando evita mencionarlo, sus peticiones afectan de raíz lo que dicho tratado resolvió y gobierna hasta hoy”, reseñó Muñoz.

Así, la estrategia diplomática y comunicacional chilena, que ya fue divulgada en una producción audiovisual, viró para dirigirse a Europa. Asimismo, el jefe de la diplomacia chilena especifica en su escrito que “la demanda representa una amenaza a la estabilidad de las fronteras, así como al principio básico del derecho internacional de la observancia de los tratados”. Una vez más, esta postura fue negada categóricamente en La Paz.

“Bolivia no ha solicitado a la Corte Internacional de Justicia la modificación del Tratado de Paz y Amistad de 1904 ni la modificación de ninguna frontera”, insistió ayer la Cancillería boliviana en el comunicado. La Paz precisó que el espíritu de la demanda reside lejos de ese criterio y que tiene el fin de que la CIJ “declare que Chile tiene una obligación pendiente de negociar con Bolivia, entendiendo que la negociación es la base del sistema internacional y rehuir a ella puede ponerlo en riesgo”.

Pero Muñoz también consideró que “el Gobierno de Chile está convencido de que el desarrollo de América Latina pasa en forma importante por erradicar los fantasmas del pasado y girar la vista hacia adelante. La demanda boliviana en nada ayuda a tal propósito”.

El expresidente y vocero de la demanda marítima boliviana en el ámbito internacional, Carlos Mesa (2003-2005), respondió a Muñoz a través del mismo medio escrito español. El exmandatario fijó su posición en un artículo de título La verdad de la demanda boliviana, en el que enfatiza que “la mejor forma de encarar con mirada limpia el siglo XXI” es resolviendo el diferendo marítimo, e insistió en que la acción legal en la CIJ tiene asidero en la figura de Compromisos Unilaterales de los Estados, sin tocar el Tratado de 1904.

La exautoridad recordó que “a lo largo de casi un siglo”, en distintas oportunidades, mandatarios y diplomáticos de Chile comprometieron de manera formal “y por escrito, un acceso soberano al mar” a Bolivia. Aclaró que el Pacto de Bogotá (1948), en su artículo VI, estipula que “las naciones firmantes aceptan la jurisdicción de la Corte en temas no resueltos y pendientes entre Estados. Éste es el caso”, remarcó Mesa, quien realizó una gira para contrarrestar los efectos de la estrategia de Chile.

Demanda y el proceso en La Haya

Fase oral

Se prevé que la CIJ abra en 2015 una etapa de alegatos orales y defina si es o no competente para atender la demanda. De declararse competente, se iniciará el proceso de fondo.

Perú

El canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, dijo el lunes en Santiago que “es muy bueno” que el actual diferendo legal entre Bolivia y Chile sea resuelto “en base al derecho internacional” y precisó que su país no interferirá en este proceso.

Vocero

Carlos Mesa llevó los argumentos bolivianos a la comunidad internacional y a organismos como la ONU y la OEA.

Mujica: Mercosur debe conocer el diferendo

El presidente de Uruguay, José Mujica, consideró que Bolivia debe acudir al Mercado Común del Sur (Mercosur) para coadyuvar en la concreción de una salida al mar y dar solución al diferendo que sostiene con Chile tras la invasión del puerto de Antofagasta y posterior Guerra del Pacífico que dejó al país sin un acceso a la costa.

“De alguna manera, Bolivia tiene que salir al mar y si no puede salir por allá, tiene que salir por acá. Mientras tanto, seguir luchando por lo otro. Este es un problema que tiene que verlo el Mercosur. Bolivia tiene que pedir ayuda al Mercosur para tratar este problema”, indicó Mujica y señaló que es “consciente de la dificultad que tiene Bolivia” por el enclaustramiento, en una entrevista concedida al diario cruceño El Deber.

Desde Santiago, el canciller de Chile, Heraldo Muñoz, replicó al Mandatario uruguayo y aseguró que “Bolivia goza de acceso al mar. No tiene acceso soberano, pero que tiene acceso al mar es absolutamente indudable”, en referencia a los “beneficios” que entregó su país a través del “más amplio y libre tránsito por los puertos chilenos”. La Paz cuestionó en reiteradas oportunidades tales beneficios por no ser efectivos.

El presidente Mujica explicó que el Gobierno boliviano tiene dos posibilidades alternativas para conseguir un acceso al océano que dependen de la concreción de la construcción de un puerto en costas uruguayas. “Hay dos ofertas, una en Nueva Palmira y otra en Montevideo”, señaló. Bolivia y Uruguay firmarán en la cumbre del Mercosur de diciembre un memorándum de entendimiento de acceso preferencial al Puerto de Aguas Profundas que el Gobierno uruguayo tiene previsto construir sobre su costa del océano Atlántico.

Mar: Bolivia pide a Chile que respete a CIJ y espere decisión

El Gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia invitó “amistosamente a la República de Chile a que, por respeto a la Corte Internacional de Justicia y al Sistema Internacional de Naciones Unidas que representa, espere a que sea ésta la que se pronuncie sobre la competencia de la demanda presentada por Bolivia”.
La postura la transmitió la Cancillería a través de un comunicado que surge en medio de las apreciaciones del canciller de Chile, Heraldo Muñoz, quien consideró que “lo que hay por parte de Bolivia” con la demanda “es un intento encubierto de desconocer el Tratado de 1904, lo cual es inaceptable”, según dijo.
“Bolivia sostiene que su demanda no toca el Tratado de 1904; pero lo cierto es que aun cuando evita mencionarlo, sus peticiones afectan de raíz lo que dicho tratado resolvió y gobierna hasta hoy (SIC)”, señaló el ministro Muñoz en el artículo “Detrás de una demanda boliviana”, que se publicó en el diario español El País, el 25 de noviembre.
El Ministerio de Relaciones Exteriores aclara que “Bolivia no ha solicitado a la Corte Internacional de Justicia la modificación del Tratado de Paz y Amistad de 1904, ni la modificación de ninguna frontera”.
“Bolivia ha solicitado a la Corte Internacional de Justicia que declare que Chile tiene una obligación pendiente que negociar con Bolivia, entendiendo que la negociación es la base del sistema internacional y rehuir a ella puede ponerla en riesgo”, refiere el comunicado.
En el artículo publicado en el diario español, Muñoz reconoce que las autoridades de su país formularon “propuestas para satisfacer la aspiración marítima boliviana”, sin embargo responsabiliza a las autoridades de Bolivia de que éstas no alcanzaran acuerdos.
Obligado por el comportamiento dilatorio de las autoridades chilenas, el presidente Evo Morales decidió el 23 de marzo de 2011 acudir a tribunales internacionales para solucionar de forma definitiva el enclaustramiento marítimo, sellado por Chile tras la invasión de 1879.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, decidió objetar la competencia de la Corte, y Bolivia reafirmó la jurisdicción del tribunal sobre la demanda.
En opinión del representante internacional de Bolivia para la Causa Marítima, Carlos Mesa, no deja de ser significativo que Chile intente “desconocer la competencia de la Corte a la que reconocen todos los Estados democráticos y respetuosos del derecho internacional”.
Bolivia perdió 120.000 kilómetros cuadrados de territorio y 400 km de costa tras la invasión de Chile (1879).


Mesa: Pacto de Bogotá avala demanda
El representante internacional de Bolivia para la Causa Marítima, Carlos Mesa, afirmó que el Pacto de Bogotá avala la decisión boliviana de acudir a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya.
Así lo afirma en el artículo “La verdad de la demanda boliviana”, publicado el 27 de noviembre en el diario español El País, dos días después de que el mismo periódico reprodujo un escrito del canciller de Chile, Heraldo Muñoz.
En el escrito, Mesa insiste en que la demanda boliviana no tiene sus fundamentos en el Tratado de 1904, “por el contrario, su pilar fundamental tiene que ver con los compromisos unilaterales de los Estados”.
Además refiere que “la CIJ ha fallado en casos anteriores fundamentados en el concepto de que un compromiso o una promesa formal hecha por un Estado a otro Estado es jurídicamente exigible”.
En efecto, a lo largo de casi un siglo, presidentes, ministros de Relaciones Exteriores y embajadores de Chile hicieron compromisos formales y por escrito a Bolivia para otorgarle un acceso soberano al mar.
“El Pacto de Bogotá (1948) en su artículo VI estipula claramente que las naciones firmantes aceptan la jurisdicción de la Corte en puntos no resueltos y pendientes entre Estados. Éste es el caso. Esos compromisos que no se concretaron están pendientes y no han sido resueltos, razón por la que el apego y respeto al Pacto de Bogotá avala la decisión boliviana de acudir a La Haya”, argumenta.
El 15 de julio de este año, Chile objetó la competencia de la Corte con una excepción preliminar que la presentó su agente Felipe Bulnes.
Bolivia respondió a la objeción de Santiago el 7 de noviembre, en la cual solicita al principal órgano judicial de las Naciones Unidas que declare que la demanda marítima “se encuentra dentro de su jurisdicción”.
“Bolivia está convencida de que la mejor forma de encarar con mirada limpia el siglo XXI y erradicar los fantasmas del pasado es resolver el tema de su enclaustramiento a través de un acceso soberano al mar”, insiste Mesa en clara respuesta a Muñoz.



Mujica sugiere intervención del Mercosur
El presidente de Uruguay, José Mujica, instó a sus pares del Mercado Común del Sur (Mercosur) a ayudar a Bolivia para que obtenga una salida al mar “como sea y por dónde sea”.
En una entrevista que le realizaron periodistas de El Deber, el mandatario uruguayo señaló que el acceso al mar “es un problema histórico que tiene Bolivia, soy consciente de la dificultad que tiene Bolivia, que no la vamos a superar de inmediato, será con el tiempo”.
“Los pueblos no pueden vivir anacrónicamente. De alguna manera Bolivia tiene que salir al mar y si no puede salir por allá, tiene que salir por acá. Mientras tanto, seguir luchando por lo otro. Éste es un problema que tiene que ver el Mercosur. Bolivia tiene que pedir ayuda al Mercosur para tratar este problema”, indicó Mujica.
Los medios chilenos, como La Tercera, reprodujeron parte de estas declaraciones y solicitaron una apreciación al canciller de Chile, Heraldo Muñoz.
“Un Canciller no debe comentar los dichos de un Presidente, pero lo que sí puedo afirmar es que Bolivia sí tiene acceso al mar y tiene acceso al mar justamente por el Tratado de 1904 que le otorgó el más amplio y libre tránsito por los puertos chilenos”, respondió el Ministro en una rueda de prensa tras reunirse con excancilleres chilenos para analizar la demanda boliviana ante La Haya.
La posición del Canciller chileno es recurrente en la estrategia de los gobiernos de ese país, ejercida desde hace más de un siglo para dilatar el avance de las negociaciones que puedan haber con Bolivia, que siempre ha reclamado por la solución de la más que centenaria mediterraneidad.

Friday, November 28, 2014

La verdad de la demanda boliviana

El País Internacional. Chile y Bolivia tienen sin duda pendiente el desafío de construir relaciones de futuro resolviendo los temas pendientes del siglo XIX.

El Gobierno boliviano ha presentado una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en la que pide a ese alto tribunal que obligue a Chile a negociar con Bolivia para otorgarle un acceso soberano al mar.

Bolivia y Chile firmaron en 1904 un Tratado por el que Chile se quedó con todo el territorio boliviano que había invadido en 1879. Bolivia respetó y respeta ese Tratado como respeta todos los tratados que ha suscrito a lo largo de su historia. El Estado boliviano está convencido de que el respeto a los tratados internacionales es la base del orden jurídico internacional.

El destacado canciller y presidente de Chile, Domingo Santa María, afirmó ante el nuevo escenario entre ambas naciones: “No olvidemos por un instante que no podemos ahogar a Bolivia… Privada de Antofagasta y de todo el Litoral que antes poseía hasta el Loa, debemos proporcionarle por alguna parte un puerto suyo, una puerta de calle, que le permita entrar al interior sin zozobra, sin pedir venia. No podemos ni debemos matar a Bolivia”.
Es sobre esa lúcida visión que muchos gobiernos chilenos ofrecieron formalmente a Bolivia un acceso soberano al mar, antes y después del Tratado y completamente al margen de este.

La demanda boliviana no tiene sus fundamentos en el Tratado de 1904, por el contrario, su pilar fundamental tiene que ver con los Compromisos Unilaterales de los Estados. La CIJ ha fallado en casos anteriores fundamentados en el concepto de que un compromiso o una promesa formal hecha por un Estado a otro Estado es jurídicamente exigible.

A lo largo de casi un siglo diferentes presidentes, ministros de Relaciones Exteriores y embajadores de Chile hicieron compromisos formales y por escrito a Bolivia de otorgarle un acceso soberano al mar. Esos compromisos formales y no otra cosa son los que Bolivia considera en su demanda.

El Pacto de Bogotá (1948) en su artículo VI estipula claramente que las naciones firmantes aceptan la jurisdicción de la Corte en temas no resueltos y pendientes entre estados. Este es el caso. Esos compromisos que no se concretaron están pendientes y no han sido resueltos, razón por la que el apego y respeto al Pacto de Bogotá avala la decisión boliviana de acudir a La Haya.

En este contexto no debe confundirse la idea de un diálogo con la de una promesa formal. Fueron compromisos y promesas formales, como se desprende claramente de los textos suscritos por los gobernantes chilenos sobre el particular, lo que Chile hizo con Bolivia.

El forzado enclaustramiento boliviano la priva de una presencia en el Pacífico, presencia que tuvo por 55 años. Las razones que explican la demanda, cuyas bases jurídicas considerará la Corte, son no sólo aquellas que refiere la historia, sino sobre todo la importancia crucial de una presencia boliviana plena y con todo los derechos de un país con litoral en la Cuenca del Pacífico, la más importante en el siglo XXI desde el punto de vista económico.

Bolivia es una nación pacifista y como tal ha hecho durante más de un siglo los mayores esfuerzos para lograr un acuerdo entre partes que la falta de una voluntad política real de Chile ha hecho imposible. Conviene recordar además que el presidente Morales ha sido el mandatario boliviano que ha demostrado mayor disposición con los gobernantes y el pueblo chileno para intentar una solución dialogada al enclaustramiento boliviano. Es por esa razón que Bolivia ha decidido acudir al máximo tribunal internacional para resolver en paz este diferendo.

No deja de ser significativo que la primera acción de Chile al conocer la acción jurídica de Bolivia haya sido precisamente desconocer la competencia de la Corte Internacional de Justicia a la que reconocen todos los estados democráticos y respetuosos del derecho internacional.

Bolivia está convencida de que la mejor formar de encarar con mirada limpia el siglo XXI y erradicar los fantasmas del pasado, es resolver el tema de su enclaustramiento a través de un acceso soberano al mar.

Chile y Bolivia tienen sin duda pendiente el desafío de construir relaciones de futuro resolviendo los temas pendientes del siglo XIX, para entrar definitivamente en el siglo XXI.

Carlos D. Mesa Gisbert fue presidente de Bolivia y es representante internacional de Bolivia para la Causa Marítima.

Mesa responde a canciller Muñoz y dice que demanda ante La Haya apunta a "compromisos" de Chile

Ex Presidente de Bolivia y vocero de la demanda de ese país ante Corte Internacional publicó una columna en el diario El País donde asegura que su país fue "forzado" a un "enclaustramiento".

"La verdad de la demanda boliviana". Ese es el nombre de la columna publicada hoy por el ex Presidente de Bolivia Carlos Mesa en el diario El País.

La publicación del también vocero de la demanda de su país ante la Corte Internacional de Justicia ocurre a dos días que en el mismo medio el canciller chileno Heraldo Muñoz escribiera que la ofensiva paceña "representa una amenaza a la estabilidad de las fronteras"
"Bolivia quiere hacer creer que se encuentra enclaustrada", dijo Muñoz en su columna a El País.

Mesa en su columna recalca que "Bolivia y Chile firmaron en 1904 un Tratado por el que Chile se quedó con todo el territorio boliviano que había invadido en 1879. Bolivia respetó y respeta ese Tratado como respeta todos los tratados que ha suscrito a lo largo de su historia. El Estado boliviano está convencido de que el respeto a los tratados internacionales es la base del orden jurídico internacional".

Acto seguido, el ex Mandatario recuerda declaraciones del ex canciller y presidente de Chile, Domingo Santa María, quien habría afirmado que “no podemos ahogar a Bolivia… Privada de Antofagasta y de todo el Litoral que antes poseía hasta el Loa, debemos proporcionarle por alguna parte un puerto suyo, una puerta de calle, que le permita entrar al interior sin zozobra, sin pedir venia. No podemos ni debemos matar a Bolivia”.

"Es sobre esa lúcida visión que muchos gobiernos chilenos ofrecieron formalmente a Bolivia un acceso soberano al mar, antes y después del Tratado y completamente al margen de este", asegura Mesa.

Mesa asegura que "la demanda boliviana no tiene sus fundamentos en el Tratado de 1904, por el contrario, su pilar fundamental tiene que ver con los Compromisos Unilaterales de los Estados".
"La CIJ ha fallado en casos anteriores fundamentados en el concepto de que un compromiso o una promesa formal hecha por un Estado a otro Estado es jurídicamente exigible", agrega.

El vocero de la demanda hace hincapié en que "a lo largo de casi un siglo diferentes presidentes, ministros de Relaciones Exteriores y embajadores de Chile hicieron compromisos formales y por escrito a Bolivia de otorgarle un acceso soberano al mar. Esos compromisos formales y no otra cosa son los que Bolivia considera en su demanda".

Finalmente, el ex Presidente plantea que "el forzado enclaustramiento boliviano la priva de una presencia en el Pacífico, presencia que tuvo por 55 años".

"Las razones que explican la demanda, cuyas bases jurídicas considerará la Corte, son no sólo aquellas que refiere la historia, sino sobre todo la importancia crucial de una presencia boliviana plena y con todo los derechos de un país con litoral en la Cuenca del Pacífico, la más importante en el siglo XXI desde el punto de vista económico", concluye.


Video Mujica pide que Mercosur ayude a Bolivia con el mar

Imbuido de un espíritu latinoamericanista a prueba de toda duda, el presidente de Uruguay, José Mujica, llamó a sus pares del Mercosur a ayudar a Bolivia a obtener una salida plena y soberana al mar “como sea y por dónde sea”. Así lo afirmó durante una extensa entrevista que el diario EL DEBER realizó en Montevideo con motivo de la entrega del premio al Personaje del Año 2014, que el mandatario uruguayo recibió emocionado.

Del acto, realizado en el salón del Consejo de Ministros, participaron el director ejecutivo del Diario Mayor, Pedro Rivero Jordán, el editor del área Mundo, Carlos Morales Peña, y la periodista de investigación Cecilia Dorado, quienes realizaron una extensa entrevista que será publicada el jueves 11 de diciembre en una edición especial.

“Bolivia tiene una dificultad para salir al mar que es horrible”, indicó el mandatario, para lo cual llamó a las autoridades bolivianas a concretar el proyecto para la construcción de un puerto en las costas uruguayas. “Hay dos ofertas, una en Nueva Palmira y otra en Montevideo”, explicó.

“El puerto Atlántico de Bolivia tiene que estar acá. La hidrovía es un camino, para ello tenemos que lograr que Argentina sea menos propietaria del río Paraná y facilite un poco más las cosas. Y arreglar con Brasil la mejora en la navegación del Pilcomayo. Bolivia tiene un futuro brutal allí”, indicó.

Mujica destacó que en América Latina tuvimos muchos problemas y divisiones, pero que en la última década la región vivió una nueva etapa de mayores acuerdos entre los países. “Los latinoamericanos nos miramos entre nosotros. Antes nos dedicábamos a mirar a Europa o a Estados Unidos. Hemos logrado acuerdos entre presidentes de lo más diferentes. Ya no tenemos fanatismos, porque ya no es tiempo para las verdades absolutas”.

Consultado por EL DEBER sobre la demanda marítima boliviana que aún enfrenta al país con Chile, Mujica afirmó: “Ese es un problema histórico que tiene Bolivia, soy consciente de la dificultad que tiene Bolivia, que no la vamos a superar de inmediato, será con el tiempo. Los pueblos no pueden vivir anacrónicamente. De alguna manera Bolivia tiene que salir al mar y si no puede salir por allá, tiene que salir por acá. Mientras tanto, seguir luchando por lo otro. Este es un problema tiene que verlo el Mercosur. Bolivia tiene que pedir ayuda al Mercosur para tratar este problema”.

En ese marco, el mandatario uruguayo destacó que “Bolivia tiene el Mutún”, cuyo hierro tiene que salir a los mercados internacionales a través de una salida al mar.

Drogas y narcotráfico

Mujica alertó de que uno de los problemas más graves que enfrentan hoy los Estados en la región es el narcotráfico, que ha disparado la inseguridad y ha acrecentado la corrupción en diversos estamentos.

Señaló el caso dramático de México, donde 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, que le motivó un conflicto diplomático con el Gobierno mexicano por sus declaraciones en las que alertó de que ese país estaba en camino de convertirse en un “Estado fallido”.

La gestión de Mujica está poniendo en marcha la legalización de la marihuana como medio para romper con el tráfico de drogas que incrementó sustancialmente la inseguridad en las ciudades uruguayas.

“Recién estamos arrancando, ponerla en práctica no es fácil. Aquí no hay ninguna liberalización para que la gente consuma droga. Hay por lo menos 150.000 consumidores de marihuana. Nosotros hemos decidido producirla y asegurarles una ración que, entendemos, no es nociva. Queremos arrebatarle el mercado al narcotráfico”, indicó.

“Peor que la droga es el narcotráfico. Los efectos del narcotráfico son mucho peores, en cómo va pudriendo a la sociedad, a los gobiernos y a los organismos represivos. Como decía un militar, los policías no resisten los ´granadazos´ de 100 dólares y eso nos lleva a tener cuerpos represivos carcomidos por todos lados”, señaló.

“Me siento orgulloso de ser un laboratorio experimental de políticas que, quizás, puedan aplicar otros. Vamos a necesitar un par de años para saber si (la política de legalización de la marihuana) da resultados o no. Y si no da resultados ponemos la marcha atrás. Total, peor de lo que estamos, no vamos a estar”, sentenció

Expresidente Domingo Santa María: “No podemos ahogar a Bolivia”

Se mantiene un clima de incertidumbre todavía en la región. Chile aún no muestra voluntad de abrir el diálogo y hablar de una salida soberana al Pacífico. La negativa de hablar sobre el tema obligó al país a abrir una demanda en la Corte Internacional de justicia, cuya decisión objetó el país vecino.

Una nota publicada en El País, de España, escrita por Carlos Mesa Gisbert, se recuerda los ofrecimientos de presidentes chilenos a Bolivia para una salida soberana al Pacífico. A continuación se cita la mencionada publicación:

PRESENTACIÓN DE LA DEMANDA

El Gobierno boliviano ha presentado una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en la que pide a ese alto tribunal que obligue a Chile a negociar con Bolivia para otorgarle un acceso soberano al mar.

Bolivia y Chile firmaron en 1904 un Tratado por el que Chile se quedó con todo el territorio boliviano que había invadido en 1879. Bolivia respetó y respeta ese Tratado como respeta todos los tratados que ha suscrito a lo largo de su historia. El Estado boliviano está convencido de que el respeto a los tratados internacionales es la base del orden jurídico internacional.

Domingo Santa María, que fue canciller y presidente de Chile (1881-1886), señalaba ante el nuevo escenario entre ambas naciones: “No olvidemos por un instante que no podemos ahogar a Bolivia… Privada de Antofagasta y de todo el Litoral que antes poseía hasta el Loa, debemos proporcionarle por alguna parte un puerto suyo, una puerta de calle, que le permita entrar al interior sin zozobra, sin pedir venia. No podemos ni debemos matar a Bolivia”.

Es sobre esa lúcida visión que muchos gobiernos chilenos ofrecieron formalmente a Bolivia un acceso soberano al mar, antes y después del Tratado y completamente al margen de este.

La demanda boliviana no tiene sus fundamentos en el Tratado de 1904, por el contrario, su pilar fundamental tiene que ver con los Compromisos Unilaterales de los Estados. La CIJ ha fallado en casos anteriores fundamentados en el concepto de que un compromiso o una promesa formal hecha por un Estado a otro Estado es jurídicamente exigible.

PACTO DE BOGOTÁ

A lo largo de casi un siglo diferentes presidentes, ministros de Relaciones Exteriores y embajadores de Chile hicieron compromisos formales y por escrito a Bolivia de otorgarle un acceso soberano al mar. Esos compromisos formales y no otra cosa son los que Bolivia considera en su demanda.

El Pacto de Bogotá (1948) en su artículo VI estipula claramente que las naciones firmantes aceptan la jurisdicción de la Corte en temas no resueltos y pendientes entre estados. Este es el caso. Esos compromisos que no se concretaron están pendientes y no han sido resueltos, razón por la que el apego y respeto al Pacto de Bogotá avala la decisión boliviana de acudir a La Haya.

En este contexto no debe confundirse la idea de un diálogo con la de una promesa formal. Fueron compromisos y promesas formales, como se desprende claramente de los textos suscritos por los gobernantes chilenos sobre el particular, lo que Chile hizo con Bolivia.

El forzado enclaustramiento boliviano la priva de una presencia en el Pacífico, presencia que tuvo por 55 años. Las razones que explican la demanda, cuyas bases jurídicas considerará la Corte, son no sólo aquellas que refiere la historia, sino sobre todo la importancia crucial de una presencia boliviana plena y con todos los derechos de un país con litoral en la Cuenca del Pacífico, la más importante en el siglo XXI desde el punto de vista económico.

Bolivia es una nación pacifista y como tal ha hecho durante más de un siglo los mayores esfuerzos para lograr un acuerdo entre partes que la falta de una voluntad política real de Chile ha hecho imposible. Conviene recordar además que el presidente Morales ha sido el mandatario boliviano que ha demostrado mayor disposición con los gobernantes y el pueblo chileno para intentar una solución dialogada al enclaustramiento boliviano. Es por esa razón que Bolivia ha decidido acudir al máximo tribunal internacional para resolver en paz este diferendo.

DESCONOCE COMPETENCIA DE LA CORTE

No deja de ser significativo que la primera acción de Chile al conocer la acción jurídica de Bolivia haya sido precisamente desconocer la competencia de la Corte Internacional de Justicia a la que reconocen todos los estados democráticos y respetuosos del derecho internacional.

Bolivia está convencida de que la mejor formar de encarar con mirada limpia el siglo XXI y erradicar los fantasmas del pasado, es resolver el tema de su enclaustramiento a través de un acceso soberano al mar.

Chile y Bolivia tienen sin duda pendiente el desafío de construir relaciones de futuro resolviendo los temas pendientes del siglo XIX, para entrar definitivamente en el siglo XXI.

Carlos D. Mesa Gisbert fue presidente de Bolivia y es representante internacional de Bolivia para la Causa Marítima, y ha emprendido una cruzada para mostrar las intenciones de Bolivia y la actitud negativa de Chile.

Thursday, November 27, 2014

Muñoz: Bolivia confunde aspiración con derechos

El canciller chileno, Heraldo Muñoz, escribió en un artículo publicado en el diario español El País que “la salida soberana por territorio chileno que pide Bolivia necesariamente implica una modificación no-convenida del Tratado de Paz y Amistad de 1904, que fijó las fronteras entre Chile y Bolivia y determinó un generoso régimen de acceso no soberano de Bolivia al mar”.

Muñoz concluye, por tanto, que la demanda representa una amenaza a la estabilidad de las fronteras, así como al principio básico del derecho internacional de la observancia de los tratados.

La nota, publicada el 25 de noviembre, según el excanciller boliviano Armando Loayza, no aporta elementos nuevos al debate sobre la demanda marítima sino que ratifica lo que Chile ha sostenido desde el principio: que la demanda marítima boliviana intenta afectar el tratado de 1904.

Lo que llama la atención, dice Loayza, es que Chile le está dando fuerza a su campaña mediática para llevar su versión en el ámbito internacional.

Dijo que el diario español El País es uno de los más leídos e influyentes, especialmente en Europa.

En su artículo, Muñoz escribe que el Gobierno boliviano confunde una “aspiración con un derecho” al pretender, mediante la demanda planteada ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que Chile esté obligado a negociar una salida soberana al mar para el Estado Plurinacional.

“Un derecho así de trascendente, que afecta nada menos que la integridad territorial de un país y los tratados vigentes, no se puede inferir a partir de negociaciones y diálogos que no fructificaron”.

El canciller de Perú Gonzalo Gutiérrez aseveró la semana pasada que la demanda no toca el tratado y que más bien se basa en un memorándum de los años 50.

El canciller de Bolivia, David Choquehuanca, ratificó también en pasados días que la demanda de Bolivia contra Chile, ante la CIJ, busca encontrar una solución al centenario conflicto marítimo que existe entre ambos países, “mediante el diálogo”.

“Esa demanda no toca para nada ningún tratado internacional, menos el tratado de 1904”, subrayó Choquehuanca.

Chile invadió suelo boliviano en febrero de 1879 y desató una contienda bélica que terminó cercenando 400 kilómetros de playa y 120.000 kilómetros cuadrados de territorio.

Muñoz, en el artículo titulado “Detrás de una demanda boliviana”, señala que Bolivia sostiene que su demanda no toca el tratado de 1904; “pero lo cierto es que aun cuando evita mencionarlo, sus peticiones afectan de raíz lo que dicho tratado resolvió y gobierna hasta hoy”.

Según Muñoz, cada vez que Chile formuló propuestas para satisfacer la aspiración marítima boliviana, las conversaciones fracasaron. Para sostener esa afirmación Muñoz cita al Walter Montenegro y al excanciller Armando Loayza quien “ha argumentado que en el fracaso de las negociaciones Bolivia ha tenido ‘una responsabilidad muy alta’”.

Consultado sobre la cita de Muñoz, Loayza dijo que también es cuestión de ser autocríticos. “Hay que pensar en errores que hemos cometido como bolivianos”.

Diálogo, pero con reparos

“Hay que concordar esto a través de las vías gubernamentales”, dijo ayer el canciller Heraldo Muñoz, tras la fórmula planteada el martes por el vicecanciller de Bolivia, Juan Carlos Alurralde, para retomar el diálogo entre ambos países, congelado desde que La Paz interpuso su demanda marítima en la corte de La Haya, según un reporte del diario chileno La Segunda.

Ayer, en conversación con La Segunda, Alurralde dijo que ante la condición de Santiago de que el tema marítimo no puede conversarse porque está en La Haya, “en ese punto se dirá ‘está en la jurisdicción’” de la corte, manteniéndolo de manera formal incluido en una agenda “sin exclusiones”.

Al respecto, Muñoz dijo que “ahora hay que concordar esto a través de las vías gubernamentales y no por la prensa, ojalá concordemos para poder reanudar un diálogo”. Sin embargo, agregó que “de ninguna manera Chile va a reconocer que hay una jurisdicción del tema en La Haya, porque justamente nosotros hemos cuestionado que exista jurisdicción por parte de la corte”, aludiendo al recurso presentado en julio

Flanagan: Uruguay, solidario con países sin litoral

Solidaridad con los países vecinos sin litoral es la política del presidente de Uruguay, José Mujica, quien en diciembre próximo firmará con Evo Morales un memorándum de entendimiento para iniciar la construcción de un megapuerto de aguas profundas, mismo que le dará a Bolivia una salida al océano Atlántico. El embajador de ese país, Carlos Flanagan, habló con EL DIARIO.

“Hay una postura y política de Uruguay muy clara en cuanto a la solidaridad con los países hermanos de América del Sur que tienen una situación de mediterraneidad como son Bolivia y Paraguay”, afirmó Flanagan al referirse a la intención de este proyecto que involucra a Bolivia y Uruguay.

El objetivo de Mujica es que antes que culmine su mandato en marzo de 2015 se consolide la construcción de este puerto de aguas profundas con características similares a las facilidades que tiene en los puertos de Nueva Palmira y Montevideo.

Este puerto estará ubicado en el departamento de Rocha de Uruguay y tendrá una profundidad de 32 metros lo que garantiza que los buques mercantes atraquen (entren al puerto) sin problemas, según la explicación de Flanagan.

“Uruguay ha definido dentro de los planes del Estado la construcción de un megapuerto de aguas profundas sobre el océano Atlántico. El presidente Mujica ha sido muy enfático diciendo que antes de terminar su mandato, uno de los proyectos fundamentales que él quiere dejar encaminado es justamente el puerto de aguas profundas”.

Esta iniciativa no es nueva, recuerda Flanagan, ya que el interés por Bolivia del presidente Mujica, desde que asumió el cargo como Presidente, siempre lo manifestó. “Este es un tema que hace mucho tiempo se viene manejando incluso en la opinión pública regional, donde Mujica fue muy enfático y dijo: ‘haber vamos a entender el puerto va o va’ lo dejó muy claro”, sostuvo.

La inversión en una primera fase según el cálculo que se hizo sería de 600 millones de dólares para la construcción del megapuerto. Esta inversión implicaría obras civiles de ingeniería como rompeolas, muelles y otros.

FIRMA

Para iniciar este proyecto de gran magnitud, ambos presidentes de Bolivia, Evo Morales y de Uruguay, José Mujica, suscribirán un memorándum de entendimiento el mismo que dará inicio a la implementación de esta obra.

Flanagan informó que la suscripción de este acuerdo será en diciembre próximo. “El texto ya está acordado en ambas cancillerías y lo que resta es ver las agendas de los presidentes a los efectos de encontrar una fecha que fuera plausible para ese encuentro”.

Se manejan dos fechas tentativas: el 4 y 5 de diciembre cuando se lleve a cabo la Cumbre de la Unión de Países Suramericanos (Unasur) en Ecuador o el 17 ó 18 de diciembre en la reunión de los países que conforman el Mercado Común del Sur (Mercosur) que se efectuará en Argentina.

“Seguimos avanzando en ese proceso. Hay dos escenarios, uno son las obras preparatorias para la construcción en sí y otra la parte documental, o sea los documentos de compromiso lo que hace público y formal el ofrecimiento de Uruguay”, afirmó el representante del Gobierno uruguayo.

SOLIDARIDAD

Solidaridad entre vecinos es la frase que el embajador de Uruguay citó varias veces al referirse a las relaciones e integración de los países de Sudamérica, en especial con los países mediterráneos o que no tienen una salida al mar como es el caso de Bolivia y Paraguay, tema que no es nuevo ya que desde anteriores gestiones gubernamentales se consolidaron facilidades para las exportaciones bolivianas por el Atlántico utilizando los puertos de Nueva Palmira y Montevideo y la hidrovía Paraguay – Paraná.

“Hace muchas décadas el Uruguay le ha dado a Paraguay y a Bolivia facilidades en los puertos de nueva Palmira y Montevideo a través de la hidrovía. El puerto de nueva Palmira es el puerto más austral de la Hidrovía. En aquella época, en la década de los 70, cuando no había los contenedores se usaban galpones. Bolivia tenía un galpón sin costo en el puerto de Nueva Palmira y también facilidades portuarias en Montevideo”.

“Actualmente la mercadería no se guarda en galpones sino en contendedores y lo que se otorga son determinados metros cúbicos en esa playa, o sea que son metros móviles. Ha cambiado totalmente el concepto logístico”, explicó Flanagan.

VENTAJAS

Son varias reuniones que sostuvieron representantes de las cancillerías de Bolivia y Uruguay para tratar este tema, encuentros que datan desde hace más de dos años. En la sexta reunión el vicecanciller uruguayo, Roberto Conde, le expuso al canciller David Choquehuanca las ventajas que tiene para todos los países de la región, no solo Bolivia y Paraguay, el aprovechamiento de la hidrovía Paraná – Paraguay - Uruguay.

“Por esa hidrovía saldría toda la producción de la región en barcazas hasta el último puerto que es Nueva Palmira. Ahí habría que hacer un transbordo a barcos medianos porque habría que ir por mar abierto, el rio de La Plata hasta ese puerto que está contra la frontera de Brasil y ahí si se haría transbordo a los grandes buques que se llaman Post.Panamax. Son buques de enorme calado y de grandes dimensiones”, explicó el diplomático.

Entre los productos que se beneficiarían por la cercanía con este corredor marítimo está el hierro del Mutún que se encuentra en el municipio de Puerto Suárez de la provincia de Germán Busch del departamento de Santa Cruz y frontera con Brasil.

Para Chile, la demanda afecta su territorio

El canciller chileno, Heraldo Muñoz, escribió que el Gobierno boliviano confunde una “aspiración con un derecho” al pretender, mediante la demanda planteada ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que Chile esté obligado a negociar una salida soberana al mar para el Estado Plurinacional.

Muñoz, en su columna Detrás de una demanda boliviana, que se publicó el martes en El País (de España), señaló que “Bolivia argumenta que Chile estaría obligado a otorgarle acceso soberano al mar producto de los diálogos sobre el tema que ambos países han sostenido a lo largo de la historia. El Gobierno de La Paz confunde así una aspiración con un derecho. Un derecho así de trascendente, que afecta nada menos que la integridad territorial de un país y los tratados vigentes, no se puede inferir a partir de negociaciones y diálogos que no fructificaron”.

La semana pasada, el canciller peruano, Gonzalo Gutiérrez, aseveró que la demanda no toca el Tratado y que más bien se basa en un memorándum de los años 50. El ministro chileno reconoció que la demanda no menciona el Tratado de 1904, pero “implica una modificación no convenida” del documento.

Posición
El portavoz internacional de la demanda marítima y ex presidente de Bolivia, Carlos Mesa, consideró que el Gobierno de Perú reconoce a la Corte de La Haya como el tribunal "idóneo" para resolver el centenario diferendo marítimo entre Bolivia y Chile.

“Perú reafirma su reconocimiento de que la Corte Internacional de
Justicia es el Tribunal idóneo para resolver un diferendo como el que tenemos con Chile", escribió Mesa en su cuenta de Twitter, en alusión a las últimas declaraciones del canciller peruano Gonzalo Gutiérrez, quien sostuvo que es "muy bueno" que el diferendo boliviano-chileno se resuelva sobre la base del derecho internacional.

En el marco de una evaluación, Mesa dijo que Perú entiende la naturaleza jurídica de la demanda marítima boliviana, "que nada tiene que ver con el Tratado de 1904"

Wednesday, November 26, 2014

Diferendo marítimo "Bolivia quiere hacer creer que se encuentra enclaustrada", según Canciller Muñoz

“La demanda boliviana representa una amenaza a la estabilidad de las fronteras, así como al principio básico del derecho internacional de la observancia de los tratados”, señaló el canciller Heraldo Muñoz en una columna de opinión en el diario El País.

“La salida soberana por territorio chileno que pide Bolivia necesariamente implica una modificación no-convenida del Tratado de Paz y Amistad de 1904, que fijó las fronteras entre Chile y Bolivia y determinó un generoso régimen de acceso no soberano de Bolivia al mar”, dijo el ministro.

“El Gobierno de La Paz ampara su demanda en el Pacto de Bogotá, pero el artículo VI de ese pacto excluye de la jurisdicción de la Corte los asuntos resueltos o gobernados por tratados previos a su suscripción, efectuada el año 1948. Bolivia sostiene que su demanda no toca el tratado de 1904; pero lo cierto es que aun cuando evita mencionarlo, sus peticiones afectan de raíz lo que dicho tratado resolvió y gobierna hasta hoy”.

En este sentido, el canciller asegura que “Bolivia argumenta que Chile estaría obligado a otorgarle acceso soberano al mar producto de los diálogos sobre el tema que ambos países han sostenido a lo largo de la historia. El Gobierno de La Paz confunde así una aspiración con un derecho. Un derecho así de trascendente, que afecta nada menos que la integridad territorial de un país y los tratados vigentes, no se puede inferir a partir de negociaciones y diálogos que no fructificaron. De ser cierta la hipótesis boliviana, ningún país dialogaría con otro por el temor a que las fórmulas de acuerdo que se exploren, si fracasan, se conviertan posteriormente en obligaciones para dicho Estado”.

“Hay un asunto adicional. Cada vez que Chile, en el marco de negociaciones políticas, formuló propuestas para satisfacer la aspiración marítima boliviana, las conversaciones fracasaron por causas ajenas a la voluntad de Chile, la mayoría imputables a la política interna boliviana”, indicó.

“Bolivia quiere hacer creer a la comunidad internacional que se encuentra enclaustrada. La realidad es diferente. Bolivia goza de un irrestricto acceso al mar, de manera no soberana”, dijo el Canciller.

Asimismo, el secretario de Estado destacó las facultades que tiene Bolivia en neustro país, enfatizando que “en virtud del ya mencionado Tratado de 1904, Chile reconoció a favor de Bolivia “el más amplio y libre derecho de tránsito comercial por su territorio y puertos del Pacífico”. Este régimen fue ampliado por la Convención de Tránsito de 1937 a “toda clase de carga y en todo tiempo sin excepción alguna. Bolivia ejerce potestad aduanera sobre las cargas provenientes o manifestadas a su país y hasta dispone de sus propias instalaciones y personal de aduanas en los puertos chilenos”.

“Pero más allá de lo que señala la historia y los claros hechos, el Gobierno de Chile está convencido de que el desarrollo de América Latina pasa en forma importante por erradicar los fantasmas del pasado y girar la vista hacia adelante. La demanda boliviana en nada ayuda a tal propósito”.

“Chile y Bolivia tienen pendiente el desafío de construir relaciones de futuro. Dejar atrás el siglo XIX para entrar definitivamente al siglo XXI”, concluyó Heraldo Muñoz.

Heraldo Muñoz dice que la demanda de Bolivia ante la CIJ no menciona el tratado de 1904, pero lo afecta

El canciller de Chile, Heraldo Muñoz, reconoció que la demanda marítima boliviana presentada ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) no menciona el Tratado de 1904, aunque consideró que su contenido “afecta de raíz” lo establecido en ese documento bilateral. Añadió que su país efectivamente hizo propuestas para resolver la “aspiración” boliviana, pero las negociaciones fracasaron.

Expresó esta posición en una columna de opinión publicada el 25 de noviembre en el periódico español El País con el título “Detrás de una demanda boliviana”. En la misma hace referencia a varios aspectos de la demanda presentada por la administración del presidente Evo Morales con el objetivo de que se obligue al demandado a negociar una salida soberana al Pacífico.

“Bolivia sostiene que su demanda no toca el tratado de 1904; pero lo cierto es que aun cuando evita mencionarlo, sus peticiones afectan de raíz lo que dicho tratado resolvió y gobierna hasta hoy”, sostiene Muñoz sobre el proceso que tiene como base las propuestas de solución chilenas planteadas al diferendo arrastrado desde 1879.

La administración de Morales explicó, en reiteradas oportunidades, que la acción jurídica no toca el Tratado de 1904, por lo que consideró equivocado el argumento de Santiago sobre los riesgos que representaría el caso para la institucionalidad de los tratados que definen fronteras en el mundo.

“Un derecho así de trascendente (salida soberana al mar), que afecta nada menos que la integridad territorial de un país y los tratados vigentes, no se puede inferir a partir de negociaciones y diálogos que no fructificaron”, cuestiona Muños en su columna y responsabiliza del fracaso de las negociaciones a Bolivia.

“Cada vez que Chile, en el marco de negociaciones políticas, formuló propuestas para satisfacer la aspiración marítima boliviana, las conversaciones fracasaron por causas ajenas a la voluntad de Chile, la mayoría imputables a la política interna boliviana”, señala y apoya su posición en declaraciones de los diplomáticos Wálter Montenegro y Armando Loayza.

El gobierno de Morales decidió llevar el diferendo marítimo con Chile a la CIJ ante la falta de respuestas de solución al conflicto desatado tras la invasión y posterior guerra del Pacífico. Santiago objetó la competencia del tribunal y La Paz reafirmó su jurisdicción. Tras una fase de alegatos orales se definirá la competencia o no del tribunal. En caso de declararse competente, la corte iniciará a tratar el fondo de la demanda.

Muñoz insiste en la columna que los bolivianos cuentan con ventajas para uso de puertos chilenos y destaca que, incluso, fue habilitado el tren Arica-La Paz. El Gobierno de La Paz denunció en varias ocasiones el incumplimiento del Tratado en lo referente al libre tránsito y la falta de operatividad de la línea férrea.

El Canciller chileno cuenta con varias columnas de opinión publicadas en el periódico español sobre diferentes temáticas.

Dávila: Perú dijo la verdad sobre la demanda marítima boliviana

La ministra de comunicación, Amanda Dávila, manifestó que el canciller David Choquehuanca, hizo una consideración sobre las declaraciones de su similar del Perú, Gonzalo Gutiérrez, quien dijo la verdad sobre la demanda planteada en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) contra Chile.

“Lo que el canciller (Choquehuanca) dijo es que el Perú dijo la verdad, que hizo una constatación que nuestra demanda marítima no aborda el tema del Tratado de 1904, no tiene que ver con ese tratado”, declaró Dávila.

La semana pasada, Gutiérrez manifestó su criterio sobre la demanda boliviana, lo que causo protestas y reacciones en las autoridades de Chile, quienes aseguraron que el Perú se estuviera inmiscuyendo en temas bilaterales que solo competen a los litigantes en el proceso judicial instaurado en La Haya.

Mesa: Perú reconoce que CIJ es idónea para ver tema mar

Las apreciaciones del canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, fueron destacadas ayer por el delegado para la Causa Marítima, Carlos Mesa, porque muestran que el Gobierno de Lima entendió la naturaleza jurídica de la demanda boliviana, que no tiene nada que ver con el Tratado de 1904, y porque reconoce que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) “es el tribunal idóneo para resolver un diferendo como el que tenemos con Chile”.
El primer criterio lo expresó el 18 de noviembre, cuando en una entrevista con RPP dijo: “Lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar”.
La postura molestó a la diplomacia chilena porque va en contra de su tesis de defensa ante el juicio iniciado el 23 de abril por Bolivia en el principal órgano judicial de la ONU.
Fue tal el impacto que el canciller de Chile, Heraldo Muñoz, llamó por teléfono a su homólogo peruano para “expresarle su profunda molestia” por sus dichos.
Fuentes de la Cancillería chilena informaron que “durante el contacto Muñoz solicitó formalmente al Canciller peruano que no se entrometa en la relación de su país con Bolivia”, reportó el portal Bío Bío de Chile.
En medio de ese escenario, el presidente peruano, Ollanta Humala, dijo el 19 de noviembre que Perú tiene que ser “respetuoso” en relación con la demanda que Bolivia planteó ante la Corte contra Chile, porque es “un problema bilateral y no trilateral”.
Pese a la postura de Humala, los medios chilenos aprovecharon el lunes la visita del canciller Gutiérrez a Santiago para volver a tocar el punto.
El Ministro señaló que “el Perú no apoya a ninguno de los países. Creemos que éste es un diferendo que es muy bueno que se resuelva en base al derecho internacional y entre los dos países”, reprodujo el diario La Tercera de Chile.
Para Mesa, este conjunto de apreciaciones del Canciller peruano permiten tres conclusiones: “Que Perú entiende la naturaleza jurídica de nuestra demanda, que nada tiene que ver con el Tratado de 1904” y “que Perú celebra el camino escogido por Bolivia de llevar el tema marítimo a la CIJ en La Haya”,
Pero además que “Perú reafirma su reconocimiento de que la CIJ es el Tribunal idóneo para resolver un diferendo como el que tenemos con Chile”, escribió Mesa en su cuenta de Twitter (@carlosdmesag).


Respaldan demanda marítima de Bolivia
El sociólogo chileno Ricardo Jiménez y el historiador peruano Wilfredo Kapsoli manifestaron en Lima su respaldo a la demanda boliviana de una salida soberana al mar como necesaria para la integración regional.
Ambos participaron junto al embajador de Bolivia en Perú, Gustavo Rodríguez, en un conversatorio sobre el punto, realizado el lunes en la sede de la Comunidad Andina de Naciones (CAN).
Jiménez destacó que en su país existe una importante corriente de opinión favorable a una solución que dé a Bolivia una salida soberana al mar, posición que comparten personalidades como el líder del Partido Progresista Marco Enríquez-Ominami.
Kapsoli enfocó su disertación en los antecedentes prehispánicos de unidad de los pueblos andinos que hoy forman Bolivia y Perú, y que proyectaron su presencia al Pacífico.
Recordó que la llamada Guerra del Pacífico en la que Chile conquistó las costas de Bolivia y territorios peruanos fue en realidad la guerra de Inglaterra, utilizando a Chile, contra ambos países, ante medidas nacionalizadoras de la riqueza del guano y el salitre por Lima y La Paz.
El historiador peruano coincidió con Jiménez en que la salida de Bolivia al mar es necesaria para la integración latinoamericana, y el sociólogo chileno subrayó que ello requiere de una decidida voluntad política.
El embajador Rodríguez, a su vez, agradeció las expresiones solidarias de Kapsoli y Jiménez. (PL)



“Esperaremos el fallo de la Corte”
El ministro de Relaciones Exteriores de Perú, Gonzalo Gutiérrez, señaló que no se arrepiente de sus comentarios sobre la demanda marítima que Bolivia formuló contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya.
Así lo dijo durante una entrevista al diario chileno La Tercera luego de su participación en el ‘Diálogo sobre integración regional: alianza del Pacífico y Mercosur’, realizado en el Centro Cultural Gabriela Mistral en Chile, de la cual reproducimos una parte:
¿Conversó con el canciller chileno Heraldo Muñoz respecto del impasse que provocaron sus dichos respecto de Bolivia?
Nosotros hemos conversado hace algunos días, hemos intercambiado mensajes, clarificando las posiciones sobre esas declaraciones y quedó perfectamente transparente que Perú no tiene una posición a favor de uno u otro de los países que están en este diferendo en La Haya. Ellos han escogido esa vía para solucionar la controversia y esperamos que sea el mecanismo adecuado.
¿Fue necesario volver a tratar hoy (lunes) este el tema con Muñoz?
No.
¿Por qué a su juicio la demanda boliviana no tiene que ver con los límites?
A ver. Si usted lo que quiere es que volvamos a eso, lo único que le voy a decir es que no me voy a expresar sobre los términos de la demanda, sino que voy a esperar, como todos en Perú, que haya una determinación de la Corte.
¿Se arrepiente de haber dicho eso?
No, no, no, no.
¿Entonces fue mal interpretado?
Ya lo hemos dicho. Hubo una mala interpretación de lo que yo señalé.

Monday, November 24, 2014

Canciller de Perú: “Es bueno que se resuelva en base al derecho internacional” diferendo Bolivia-Chile



El canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, consideró que es “bueno (que) se resuelva en base al derecho internacional” el diferendo marítimo entre Bolivia y Chile. Dijo que su país esperará conocer el pronunciamiento de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), donde radica el diferendo bilateral.

"N o debe interferirse en ese proceso, ese proceso debe desarrollarse de acuerdo a las normas que ambos países han establecido y vamos a esperar a ver qué dice La Haya", afirmó, según una nota publicada hoy por el periódico La Tercera.

Santiago reaccionó frente a unas anteriores declaraciones de Gutiérrez en sentido de que la demanda boliviana “no tiene nada que ver con el tratado de límites” de 1904. Gutiérrez dijo que hubo un intenso diálogo con su colega chileno Heraldo Muñoz para aclarar lo sucedido.

“El Perú no tiene apoyo a ninguno de los países. Creemos que este es un diferendo que es muy bueno que (se) resuelva en base al derecho internacional y que se resuelva entre los dos países”, sostuvo.

La administración del presidente Evo Morales decidió llevar el diferendo marítimo con Chile a la CIJ ante la falta de respuestas de solución al conflicto arrastrado desde 1879, tras la invasión y posterior guerra del Pacífico. Santiago objetó la competencia del tribunal en el caso y La Paz reafirmó su jurisdicción.

La CIJ abrirá una etapa de alegatos orales y definirá si es o no competente para atender la demanda boliviana. De declararse competente, iniciará el proceso de fondo a través del cual los bolivianos buscan se obligue al demandado a negociar una salida soberana al Pacífico sobre la base de los ofrecimientos de resolución hechos en el pasado.

El canciller de Perú se refirió a la demanda de Bolivia tras participar del seminario "Diálogo sobre integración regional: Alianza del Pacífico y Mercosur”, realizado esta mañana en el Centro Cultural Gabriela Mistral en Chile.

Saturday, November 22, 2014

Canciller Choquehuanca: Perú dice la verdad

El canciller David Choquehuanca respaldó ayer las declaraciones de su homólogo peruano, Gonzalo Gutiérrez, en sentido de que la demanda de Bolivia contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya no tiene relación con el Tratado de 1904.

“La demanda no toca para nada ningún tratado internacional, menos el Tratado de 1904. Chile dice que nosotros estamos poniendo en riesgo los límites internacionales y cualquiera que lea o cualquiera que se informe sobre la demanda boliviana que nosotros hemos difundido a través de los medios y hemos entregado el Libro del Mar en la G77 a los representantes de gobierno y estos han visto con interés y ahí está el interés y ahí está el resultado como la declaración del canciller del Perú que dice la verdad”, afirmó.

El Jefe de la diplomacia boliviana recalcó que el objetivo de Bolivia es que, mediante el diálogo, la demanda ante la CIJ de La Haya busca alcanzar una solución definitiva para que nuestro país tenga un acceso plenamente soberano al océano Pacífico.

El canciller peruano Gonzalo Gutiérrez afirmó el miércoles que “lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites (Tratado de 1904), sino con un memorando que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar”.

Esa declaración inquietó a la diplomacia chilena, cuyo titular, Heraldo Muñoz, llamó a Lima para expresar su molestia porque, aparentemente, la afirmación peruana constituye un implícito respaldo a la demanda boliviano.

Desde Chile informaron que Muñoz se comunicó telefónicamente con Gutiérrez para “expresarle su profunda molestia” por sus dichos. Fuentes de Cancillería chilena “confirmaron la respuesta chilena y que durante el contacto Muñoz solicitó formalmente al canciller peruano que no se entrometa en la relación de su país con Bolivia”.

Desde Lima, informaron que el presidente Ollanta Humala intervino ante la molestia chilena, asegurando que el conflicto es un problema bilateral no trilateral.

Los embajadores de Chile y Perú pusieron en Lima paños fríos por considerar un tema delicado y estrictamente bilateral. El canciller Muñoz dio a entender que ningún país comentaría sobre el tema, por lo que dio por superado el impasse que se produjo entre miércoles y jueves entre la diplomacia de ambos países.

En el transcurso de todos los meses desde que el Gobierno boliviano presentó la memoria histórica ante La Haya y reveló su contenido, el gobierno de Michelle Bachelet maneja un solo discurso: Bolivia está incumpliendo el Tratado de Paz y Amistad de 1904 y que este tribunal internacional no tiene competencia para resolver este tema.

Bolivia, por su lado, desmintió en varias oportunidades la teoría chilena mostrando pruebas documentadas del incumplimiento de Chile que en varias oportunidades se comprometió a otorgar una salida soberana para Bolivia.

Friday, November 21, 2014

Mar: Unasur espera que Bolivia y Chile encuentren buenas salidas

El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, exteriorizó ayer el interés del bloque de que los Gobiernos de Bolivia y Chile encuentren “buenas soluciones” en el diferendo marítimo que mantienen en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya.
“El aporte de la Unasur es no tomar partido, no lo vamos a hacer, excepto para decir que esperamos que se encuentren buenas salidas y que esas salidas sean favorables para los intereses de la región”, expresó Samper durante la conferencia de prensa que ofreció en escalinatas del hall del Palacio de Gobierno.
El exmandatario colombiano, que se reunió con el presidente en ejercicio Álvaro García Linera, indicó de manera general que las diferencias o los procesos contenciosos que se llevan entre países “para nosotros merecen respeto y consideración”.
“Existen mecanismos internacionales y regionales de solución de controversias, de tramitación de estas diferencias, que, por supuesto, los países sabrán entender y utilizarán de la manera que consideren más conveniente para defender sus intereses”, indicó.
Bolivia demandó a Chile en la CIJ el 24 de abril de 2013 en busca de un diálogo de buena fe que le devuelva su acceso soberano al océano Pacífico, que perdió como consecuencia de la invasión chilena en febrero de 1879.
Además de su enclaustramiento, Bolivia fue apartada de 400 kilómetros de costa y puerto y 120.000 kilómetros cuadrados de territorio.
El 15 de julio de este año, el Gobierno de Chile objetó la competencia de la Corte, pues en su criterio con la demanda boliviana se intenta desconocer el Tratado de 1904.
Sin embargo, el reclamo boliviano no hace referencia al documento, sino a los compromisos que asumieron las administraciones de Santiago a través de presidentes y cancilleres para devolver a Bolivia su cualidad marítima.


“Canciller entendió corazón de la demanda”
Redacción central / Cambio
El delegado boliviano para la Causa Marítima, el expresidente Carlos Mesa, señaló que el canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, “entendió el corazón jurídico” de la demanda marítima contra Chile.
“La declaración del Canciller peruano se debe valorar palabra por palabra. Conclusión: entendió el corazón jurídico de nuestra demanda (sic)”, escribió Mesa en su cuenta oficial de Twitter (@carlosdmesag).
El 18 de noviembre, el Canciller de Perú, en declaraciones a Radio Programas (RPP), dijo: “Lo que Bolivia presentó en La Haya no tiene que ver con su tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder a Bolivia una salida al mar”.
Esto causó molestia en Chile y el presidente Ollanta Humala dijo el miércoles que Perú tiene que ser “respetuoso” del litigio.
En tanto, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, dijo ayer que “no corresponde que otro país comente o interprete ya sea la demanda boliviana o la interposición de la objeción preliminar de Chile”.



Caravana irá hasta el puerto de Ilo
Con el objetivo de que los Gobiernos de Bolivia y Perú inicien la construcción de un corredor bioceánico, el 4 de diciembre partirá de La Paz, rumbo al puerto de Ilo, en Perú, la Primera Caravana Patriótica de Integración Bolivianos hacia el mar.
El Comité de Defensa del Patrimonio Nacional y la Soberanía (Codepanal) impulsa el recorrido junto a los comités impulsores de la carretera San Andrés de Machaca-Hito 27 y de la ruta Patacamaya-Nazacara, en coordinación con el Parlamento Andino y la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados.
En la ciudad de Ilo se prepara un acto con las organizaciones sociales y se prevé la firma del documento ‘Pronunciamiento de los pueblos’, que será enviado a los gobernantes de ambos países.

Perú genera corriente de opinión por demanda

Las declaraciones del canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, no son casuales, y al parecer pretenden generar una corriente de opinión en los países de la región por la demanda marítima entre Bolivia y Chile, según el excanciller y diplomático Armando Loaiza. Por su lado el ministro de Relaciones Exteriores chileno, Heraldo Muñoz, expresó su protesta por dichas opiniones.

“La Cancillería peruana se maneja con criterios muy técnicos y profesionales, por lo tanto, las declaraciones de Gutiérrez fueron pensadas, ajustadas para promover y generar una corriente de opinión en los países del Pacífico especialmente Bolivia y Chile”, afirmó el diplomático boliviano.

Gutiérrez afirmó el martes que la demanda por soberanía marítima que presentó Bolivia contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya no tiene que ver con el Tratado de 1904 como insiste el Gobierno chileno.

“Lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar”, dijo la autoridad peruana según la agencia Andina de ese país.

Para Armando Loaiza, estas declaraciones son positivas para los objetivos bolivianos, el principal a corto plazo que la CIJ de La Haya declare que sí tiene competencia para tratar este tema y la segunda meta y más importante, es que este tribunal internacional falle a favor de la demanda boliviana y obligue a Chile negociar una salida soberana al océano Pacífico.

“Las declaraciones del canciller peruano, Gonzalo Gutiérrez son significativas, son trascendentes porque tienden a abonar la tesis boliviana. Yo creo que es significativa la posición de la Cancillería peruana y se vuelve a afirmar que en manera alguna esta posición, significa inferirse en la contienda jurídica que estamos sosteniendo en La Haya, eso es aparte”, sostuvo.

QUEJA CHILENA

El canciller de Chile, Heraldo Muñoz, reaccionó duramente luego de concluir que una declaración de su colega del Perú, Gonzalo Gutiérrez, suponía un apoyo a Bolivia en la demanda que el Estado Plurinacional presentó ante La Haya para lograr una solución a la demanda marítima.

Diferentes medios de Chile reportaron que Muñoz se comunicó telefónicamente con el Ministro de Relaciones Exteriores del Perú para “expresarle su profunda molestia” por sus dichos. Fuentes de Cancillería chilena “confirmaron la respuesta chilena y que durante el contacto Muñoz solicitó formalmente al canciller peruano que no se entrometa en la relación de su país con Bolivia”, según informa Bio Bio de Chile.

En tanto, en una conferencia de prensa con corresponsales de prensa extranjera, el presidente del Perú, Ollanta Humala, declaró que Perú tiene que ser “respetuoso” en relación con la demanda que Bolivia planteó ante la Corte Internacional de Justicia contra Chile, porque es “un problema bilateral no trilateral”.

Agregó que Perú solo “se pronunciará si algo de este tema involucra al Tratado del 29 o involucra algo en Arica”.

Por su lado, Gutiérrez afirmó que “nada de lo dicho debe ser interpretado como una toma de posición del Perú a favor de alguna de las partes”.

Ante todo este contexto, el excanciller Loaiza sostuvo que las declaraciones del canciller peruano no pueden afectar al proceso de la demanda boliviana porque los jueces de la CIJ de La Haya son magistrados independientes con un criterio basado en el Derecho Internacional

“Yo le doy un valor diplomático importante a la declaración del canciller Gutiérrez. Naturalmente esto formalmente en el juicio de La Haya no va influir en los magistrados”.

Thursday, November 20, 2014

Chile ofreció diálogo sobre soberanía marítima en 1950

El 20 de junio de 1950, el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Horacio Wálker Larraín, en una nota confidencial señaló que su país está llano “a entrar formalmente en una negociación directa destinada a buscar la fórmula que pueda hacer posible dar a Bolivia una salida propia y soberana al océano Pacífico”.
Así lo consigna El libro del mar —elaborado por el delegado para la Causa Marítima, Carlos Mesa, y la Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima (Diremar)—, que es divulgado por el Gobierno nacional como parte de los argumentos de la demanda marítima planteada contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya.
La nota de Wálker Larraín, rotulada Ministerio de Relaciones Exteriores Departamento Diplomático Confidencial, respondió a una similar que le envió el embajador boliviano en Santiago Alberto Ostria Gutiérrez, el 1 de junio de 1950.
En esa carta, Ostria Gutiérrez recordó la predisposición de autoridades chilenas que aceptaron la cesión a Bolivia de una salida propia al océano Pacifico, postura que fue plasmada también en acuerdos como el Tratado de 18 de mayo de 1895 y el Acta Protocolizada de 10 de enero de 1920.
En ese contexto, el Embajador boliviano propone al Ministro chileno ingresar “formalmente a una negociación directa para satisfacer la fundamental necesidad Boliviana de obtener una salida propia y soberana al océano Pacífico”.
A la nota Wálker Larraín respondió: “Mi Gobierno será consecuente con esa posición y que, animado de un espíritu de fraternal amistad hacia Bolivia, está llano a entrar formalmente en una negociación directa destinada a buscar la fórmula que pueda hacer posible dar a Bolivia una salida propia y soberana al océano Pacífico, y a Chile obtener las compensaciones que no tengan carácter territorial y que consulten efectivamente sus intereses”.
En su momento, el presidente chileno Gabriel González Videla (1946-1952) le comunicó a su similar estadounidense Harry Truman que la fórmula de acuerdo por la cual Bolivia obtendría un acceso soberano al mar sería a cambio del uso, por parte de Chile, de aguas del lago Titicaca.
Sin embargo, Bolivia aclaró que nunca comprometió el uso de esas aguas a favor de Chile, pero esto no aplacó la oposición generada en políticos bolivianos y chilenos y la negociación pactada mediante las notas de 1950 quedó pendiente, señala El libro del mar.
No obstante a ello, en “1961 Chile presentó a Bolivia un memorándum reafirmando el acuerdo asumido en 1950 para negociar la salida soberana de Bolivia al océano Pacífico”.



Dávila: No se busca modificar tratados
Redacción central / Cambio
Está pendiente un encuentro entre los presidentes de Bolivia y Perú.
La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, reafirmó ayer que la demanda boliviana presentada ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) contra Chile no busca modificar tratados ni fronteras.
Señaló que la postura expresada el martes por el canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, que dijo: “Lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su Tratado de Límites”, es una “constatación de que la demanda marítima boliviana no tiene que ver con el Tratado de 1904”.
“No se basa ni fundamenta jurídicamente en el Tratado de 1904, es otro su sentido, es otra su explicación jurídica e histórica (...) no estamos hablando de modificar el Tratado de 1904”, insistió la Ministra en una conferencia de prensa.
Además informó que el anunciado encuentro entre los presidentes Evo Morales y Ollanta Humala aún está pendiente, al igual que la agenda temática que abordarán.



Perú es respetuoso del litigio
El presidente peruano, Ollanta Humala, afirmó que Perú tiene que ser respetuoso en relación con la demanda que Bolivia planteó ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) contra Chile, porque es “un problema bilateral, no trilateral”.
Humala señaló que Perú sólo “se pronunciará si algo de este tema involucra al Tratado de 1929 o involucra algo en Arica”, reportó RPP noticias.
En tanto, el canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, señaló que su Gobierno sigue con atención el proceso que Bolivia y Chile tienen en la Corte, porque “involucra a dos países hermanos”.
Indicó que “nada de lo dicho (el martes) debe ser interpretado como una toma de posición del Perú a favor de alguna de las partes”. Ese día, el canciller peruano dijo a RPP que “lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites”.


Chile protesta por dichos de canciller
El canciller de Chile, Heraldo Muñoz, llamó a su similar de Perú, Gonzalo Gutiérrez, para “expresarle su profunda molestia” por sus dichos respecto al proceso que enfrenta Santiago con Bolivia, ante la Corte Internacional de Justica (CIJ), con sede en La Haya.
Fuentes de Cancillería chilena “confirmaron la respuesta chilena y que durante el contacto Muñoz solicitó formalmente al canciller peruano que no se entrometa en la relación de su país con Bolivia”, según informa Bio Bio de Chile.
Gutiérrez indicó el martes que “lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites”.
Tras ello, Perú negó que haya mostrado apoyo a un sector en litigio, subrayando el mismo canciller que “nada de lo dicho debe ser interpretado como una toma de posición del Perú a favor de alguna de las partes”.

Molestia chilena por dichos de Canciller peruano

El canciller chileno, Heraldo Muñoz, reclamó ayer a su par peruano, Gonzalo Gutiérrez, por sus declaraciones del pasado martes que, según medios de prensa chilenos, significan un presunto apoyo a la demanda marítima boliviana ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de la Haya.

Según el diario digital Bio Bio de Chile, Muñoz telefoneó a Gutiérrez para manifestarle el descontento del Gobierno de Chile tras la divulgación de sus declaraciones.

Fuentes de la Cancillería chilena “confirmaron la respuesta chilena y que durante el contacto Muñoz solicitó formalmente al Canciller peruano que no se entrometa en la relación de su país con Bolivia”.

El martes, en declaraciones a la agencia peruana Andina, Gutiérrez explicó que “lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites, sino con un memorando que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar”.

Ante la reacción del Gobierno chileno, Gutiérrez aclaró ayer que sus declaraciones no significan ninguna posición de Perú sobre un tema netamente bilateral.

“Sobre el proceso entre nuestros dos vecinos fui muy claro en señalar que no me iba a pronunciar al respecto, por tratarse de un tema bilateral que se ventila ante la Corte Internacional de Justicia”, sustentó.

Indicó que Perú “naturalmente” sigue ese, “proceso que involucra a dos países hermanos con los que nos unen tan importantes y diversos lazos, y confiamos en que, no obstante esas diferencias, prevalezcan la buena vecindad, la amistad y la voluntad de integración entre las naciones de la región”.

Humala interviene

También se manifestó el presidente peruano, Ollanta Humala,quien afirmó ayer que Perú tiene que ser “respetuoso” en relación con la demanda que Bolivia planteó ante la CIJ contra Chile, porque es “un problema bilateral no trilateral”.

En una rueda de prensa con corresponsales extranjeros, Humala señaló que Perú sólo “se pronunciará si algo de este tema involucra al tratado del 29 o involucra algo en Arica”.

Dan la razón a Gonzalo Gutiérrez

Medios de prensa chilenos entendieron las declaraciones del canciller Gonzalo Gutiérrez como un tácito apoyo peruano a la demanda marítima boliviana ante la CIJ, en momentos en que Chile ha planteado la incompetencia del máximo tribunal de justicia internacional con sede en La Haya y proclama que el alegato boliviano, el primero desde 1904, intenta modificar el tratado y, en consecuencia, alterar las fronteras y el derecho internacional.

Para contrarrestar un video formulado en ese sentido por Chile y difundido internacionalmente, Bolivia ha salido al paso con una campaña internacional fundada en que su demanda judicial no toca, ni de refilón, el tratado de 1904 y que, en cambio, se funda en las promesas incumplidas, como Estado, por los gobiernos chilenos en 1950 y 1976 para restaurarle su perdida calidad marítima. El pronunciamiento peruano “confirma que Bolivia, a través de su demanda marítima ante la CIJ, no trata de modificar ni mucho menos el tratado de 1904”, afirmó en La Paz la ministra de Comunicación, Amanda Dávila. En tanto, el excanciller Javier Murillo (1997-2000) consideró los dichos de Gutiérrez como “una declaración positiva, porque efectivamente la demanda de Bolivia no tiene nada que ver con la modificación de los límites establecidos en el tratado de 1904”.

Gobierno valora aclaración de Perú sobre juicio a Chile



La reciente señal del Perú sobre el juicio que Bolivia tramita contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha sido valorada en La Paz no como un apoyo, sino como una “aclaración” sobre los fundamentos de la demanda.

“La demanda marítima no tiene que ver con el Tratado de 1904. No modifica fronteras, no modifica límites; se basa en (...) los avances que se dieron años atrás cuando Chile ofreció reponer una salida soberana (al mar). Creemos que Perú está dando razón al fundamento de Bolivia”, afirmó ayer a los periodistas la ministra de Comunicación, Amanda Dávila.

El canciller del Perú, Gonzalo Gutiérrez, dijo el martes que la demanda boliviana no está vinculada con el Tratado de 1904, que definió las actuales fronteras entre Bolivia y Chile, en un momento en el que la diplomacia de Santiago sostiene que el país pretende afectar el sistema internacional del respeto a los tratados.

Tratado. “Lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar”, precisó el jefe de la diplomacia peruana, quien evitó hacer mayores comentarios sobre el proceso argumentando que no le correspondía a su país pronunciarse sobre un asunto bilateral y sugirió esperar la decisión de la CIJ.

“El Perú no ha expresado su apoyo a la posición de alguna de las partes en el proceso entre Bolivia y Chile que se desarrolla ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya”, dijo ayer el canciller Gutiérrez, según La Tercera, a tiempo de fortalecer su posición.

Según fuentes de la Cancillería chilena, citadas por ABI, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, llamó por teléfono a Gutiérrez y tildó su declaración como una “intromisión”. Por ello, el presidente peruano, Ollanta Humala, ratificó ayer la “neutralidad” de Lima en el litigio. Y apuntó “el mayor respeto por el presidente Evo Morales y nuestros hermanos bolivianos”.

Dávila consideró que más que un respaldo a la posición boliviana, se trata de “una constatación” del vecino país sobre los fundamentos del país en el proceso legal instaurado contra Chile en el máximo tribunal de justicia situado en La Haya (Holanda).

“Es una constatación de que la demanda marítima boliviana no tiene que ver con el Tratado de 1904; no se basa ni fundamenta jurídicamente en el Tratado de 1904”, insistió la ministra Dávila. Desde la Asamblea Legislativa, el diputado Pascual Huarachi (MAS) manifestó que “ha sido muy importante la aclaración” del Ministro peruano de Relaciones Exteriores.

A principios de mes, Bolivia entregó a la CIJ su respuesta al recurso de incompetencia que presentó Chile para neutralizar la demanda, tras lo cual el canciller Muñoz insistió en que la demanda ponía en riesgo el sistema global de los tratados limítrofes. El incidente será resuelto tras la fase oral prevista para mayo de 2015, según la previsión de las partes. Bolivia demanda que la Corte reconozca que Santiago debe negociar un acceso al mar.

Gira. El expresidente Carlos Mesa, portavoz internacional de la demanda marítima, hizo una gira por varias naciones para explicar los fundamentos de la demanda. Prevé reunirse con el secretario de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el expresidente colombiano Ernesto Samper, y espera visitar en 2015 al mandatario Ollanta Humala. En una entrevista con La Razón, publicada en el suplemento Animal Político del domingo, Mesa aclaró que la demanda de Bolivia no menciona para nada a Perú.

PERÚ TOMA DISTANCIA EN CUESTIÓN DEL MAR

El Jefe de la diplomacia chilena, protestó tras una declaración de su homólogo peruano.

"El Perú no ha expresado su apoyo a la posición de alguna de las partes en el proceso entre Bolivia y Chile que se desarrolla ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya".

Con esas palabras, el canciller peruano Gonzalo Gutiérrez salió al paso para aclarar sus declaraciones en torno a que la demanda boliviana en cuestión no apunta a modificar el Tratado de Paz y Amistad de 1904.

El diplomático peruano había sostenido un día antes que "lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su Tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar".

La molestia de santiago. Según el diario santiaguino La Tercera, tras conocer esas afirmaciones, el jefe de la diplomacia chilena, Heraldo Muñoz, llamó a Gutiérrez para expresarle su malestar.

El mencionado rotativo informó que hubo conversaciones telefónicas entre ambas autoridades.

Después, el Ministro peruano de Relaciones Exteriores sostuvo que "sobre el proceso entre nuestros dos vecinos, fui muy claro en señalar que no me iba a pronunciar al respecto por tratarse de un tema bilateral, que se ventila ante la Corte Internacional de Justicia" de La Haya.

Por ello, Gutiérrez agregó que "nada de lo dicho debe ser interpretado como una toma de posición del Perú a favor de alguna de las partes".

"Naturalmente, seguimos con atención un proceso que involucra a dos países hermanos con los que nos unen tan importantes y diversos lazos, y confiamos en que, no obstante estas diferencias, prevalezcan la buena vecindad, la amistad y la voluntad de integración entre las naciones de la región".

La Tercera dio cuenta de que Chile dio por superado el incidente.

LOS JUECES DE LA HAYA ANALIZAN LA RÉPLICA BOLIVIANA AL PEDIDO CHILENO DE INCOMPETENCIA DE ESTA CORTE SOBRE EL TEMA.

110 años de vogencia tiene el Tratado de Paz y Amistad suscrito entre Bolivia y Chile.

Wednesday, November 19, 2014

Perú: Bolivia no plantea a Chile demanda por límites



La demanda que Bolivia presentó contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) no tiene que ver con el Tratado de límites de 1904, sino con un documento en el que “aparentemente” Santiago se comprometía a entablar una negociación, afirmó ayer el canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez.

El jefe de la diplomacia peruana hizo esta declaración en Lima, en momentos en los que Chile realiza una campaña internacional promoviendo la idea de que la demanda boliviana pone en riesgo los tratados internacionales de límites, advertencia que el gobierno del presidente Evo Morales la rechazó desde un principio argumentando que la acción legal no tiene ninguna relación con el Tratado y que únicamente busca una puerta a la negociación sobre la demanda marítima.

“Lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su Tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar”, sostuvo Gutiérrez durante una entrevista que concedió a Radio Programas del Perú, que posteriormente fue reproducida en parte por la agencia oficial Andina. La autoridad evitó hacer mayores comentarios sobre el proceso argumentando que no le correspondía a su país pronunciarse sobre un asunto bilateral y sugirió esperar la decisión que vaya a tomar la CIJ, en La Haya.

A principios de mes Bolivia entregó a ese tribunal su respuesta al recurso de incompetencia que había presentado Chile para neutralizar la demanda internacional, tras lo cual el canciller chileno, Heraldo Muñoz, insistió en que la demanda marítima boliviana ponía en riesgo el sistema global de los tratados limítrofes.

“Bolivia pretende desconocer de forma encubierta el Tratado de 1904, que fijó de manera definitiva, a perpetuidad, la frontera de los dos países”, señaló entonces en Santiago. Añadió así que el proceso que solicitó el país “pone un signo de interrogación sobre los tratados limítrofes en general”.

En julio de este año, la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados de Chile decidió iniciar una cruzada internacional con el argumento de que un fallo favorable a Bolivia pondría en riesgo las delimitaciones fronterizas avaladas mediante tratados internacionales y ratificados por los respectivos Estados.

Tres meses después, el jueves 2 de octubre, el Gobierno chileno presentó un video para responder a la demanda boliviana en el que también se menciona que Bolivia estaría cuestionando el Tratado de 1904, vigente por efecto de la Guerra del Pacífico (1879-1881) en la que también participó Perú.

“Esa demanda de Bolivia, con el mayor respeto, no es una demanda contra Chile, en último término es una demanda que afecta a todo el sistema jurídico internacional, porque si se acogiera la tesis boliviana no habría ningún tratado seguro”, advierte en el audiovisual el exgobernante chileno Ricardo Lagos. El video fue divulgado en todo el mundo y está además inserto en las redes sociales.

Desde el inicio de la demanda, Bolivia explicó que el proceso legal planteado ante la CIJ no tocaba el Tratado de 1904. El 6 de junio de 2013, por ejemplo, el presidente Evo Morales hizo esa explicación durante una entrevista con la cadena estadounidense CNN. “No se puede adquirir derechos con una invasión, ni con guerras, por eso nosotros no estamos pidiendo el cumplimento del Tratado (de 1904), sino la devolución de la salida al mar con soberanía”, puntualizó el Mandatario en esa oportunidad, en la que además ratificó su confianza en la CIJ.

Proceso de Bolivia ante la CIJ

Demanda

Bolivia demandó a Chile ante la CIJ y un año después entregó la memoria para justificar el litigio.

Recurso

Santiago impugnó la competencia de la corte internacional para conocer la demanda del país y paralizó el proceso legal.

Procesos

Bolivia pidió hace dos semanas a la CIJ que se declare competente. Se aguarda la definición de nuevos plazos y la fase oral prevista para mayo del siguiente año.

Mesa recordó que Chile prometió mar sin el Tratado

Luis Mealla

El portavoz internacional de la demanda marítima de Bolivia, el expresidente Carlos Mesa, afirmó que Chile ofreció un acceso al mar, pero sin tocar el Tratado de límites vigente entre ambos países desde 1904. El exgobernante (2003-2005) sostuvo a La Razón, en una entrevista publicada el domingo, que estas promesas son las que están contenidas en la demanda legal que Bolivia planteó contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya.

Bolivia demanda ante la CIJ que se reconozca que Santiago debe negociar con La Paz de buena fe un acceso soberano al mar, pero Chile alega que nadie puede obligar a un país a ceder soberanía. Mesa, quien hizo una gira por varias naciones, prevé reunirse antes de fin de año con el secretario de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el expresidente colombiano Ernesto Samper.

Canciller de Perú: Demanda marítima no tiene que ver con Tratado

El canciller de Perú, Gonzalo Gutiérrez, afirmó ayer que la demanda por soberanía marítima que presentó Bolivia contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya no tiene que ver con el Tratado de 1904 como insiste el Gobierno chileno.

“Lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del 50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar”, dijo la autoridad peruana según la agencia Andina de ese país.

En el transcurso de todos los meses desde que el Gobierno boliviano presentó la memoria histórica ante La Haya y reveló su contenido, Chile maneja un solo discurso: Bolivia está incumpliendo el Tratado de paz y amistad de 1904 y que este tribunal internacional no tiene competencia para resolver este tema.

Bolivia, por su lado, desmintió en varias oportunidades la teoría chilena mostrando pruebas documentadas del incumplimiento de Chile que en varias oportunidades se comprometió a otorgar una salida soberana para Bolivia.

En este escenario, el Canciller de Perú quien a pesar que recalcó que no le corresponde pronunciarse sobre este tema entre Bolivia y Chile, reconoció y dio la razón a Bolivia afirmando que la demanda no tiene nada que ver con el Tratado suscrito anteriormente.

Gutiérrez señaló que ambas partes han presentado sus respectivas posiciones y, por tanto, corresponde ahora esperar qué decisión final adoptará el tribunal internacional.

ALEGATOS ORALES

Ante la respuesta de Chile que dice que la CIJ de La Haya no tiene competencia en la demanda marítima y la contra-respuesta boliviana que dijo que este tribunal internacional sí le compete, Bolivia se prepara para presentar su alegato oral en esta instancia internacional el 2015.

El expresidente de Bolivia y delegado internacional por la causa marítima, Carlos Mesa, declaró a EL DIARIO que Bolivia está convencida de que la Corte es competente y que los argumentos de Chile no tienen ninguna fundamentación real hablar de incompetencia. El siguiente paso es una presentación de forma oral de ambos países.

“Esto se producirá a mediados o antes de la primera mitad del año 2015. Una vez que se hayan presentado los alegatos orales de Chile y de Bolivia la Corte se reunirá para fallar sobre su competencia. (…) Esa presentación oral la hará Chile primero y responderá Bolivia”, explicó Mesa.

Tuesday, November 18, 2014

Canciller peruano: "Demanda boliviana no tiene que ver con el tratado"

El Canciller de Perú Gonzalo Gutiérrez aseveró hoy que la demanda boliviana contra Chile, planteada ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), "no tiene que ver" con el tratado de límites entre ambos países.

"Lo que Bolivia presentó ante La Haya no tiene que ver con su tratado de límites, sino con una memoranda que se intercambió entre los países en la década del '50, en la que aparentemente Chile se comprometía a entablar una negociación para conceder una salida de Bolivia al mar", dijo el Ministro de Relaciones Exteriores peruano, según la agencia Andina.

Chile argumenta que la demanda de Bolivia pondría en riesgo la seguridad jurídica de los tratados a nivel internacional, porque pretende cambiar lo suscrito en el Tratado de 1904. Por el contrario, el portavoz de la causa marítima boliviana, Carlos Mesa, señaló en varias oportunidades que la demanda no se relaciona con ese Tratado.

"Chile quiere hacerle creer al mundo que, sobre un hecho real, la firma del Tratado de 1904, porque sus autoridades lo dicen la demanda boliviana se basa en el desconocimiento del mencionado tratado. No, una y cien veces no; la demanda no se basa ni directa ni indirectamente en ese tratado", escribió el expresidente en su columna denominada Medias Verdades en La Haya.

Hoy se inicia Mar con Bolivia en suelo chileno

Desde hoy y hasta el 27 de este mes se realizará el encuentro Mar con Bolivia, en Valparaíso y Santiago de Chile, con la participación de escritores, artistas y académicos de ambos países, cuyo propósito es comenzar a sazonar un genuino chairo chileno-boliviano a la altura de los desafíos vecinales por venir.

El evento incluye lecturas de poesía en las Fundaciones Pablo Neruda y Pablo de Rokha, performances urbanas en diversas comunas de Santiago, un coloquio interdisciplinario denominado Debates fronterizos: Nación, contrabando y migración, en la Universidad de Valparaíso, y diversas mesas redondas en Santiago.

La ministra de Autonomías del Estado Plurinacional, la escritora Claudia Peña Claros, intervendrá en la Universidad de Valparaíso y en la Universidad Metropolitana, de Santiago y, a la vez, participará en lecturas de poesía, junto a los escritores bolivianos Marcelo Villena, Claudia Pardo, Marcia Mogro, Emma Villazón y Eduardo Álvarez, y los chilenos Carlos Cociña, Soledad Fariña y Marina Arrate

Sunday, November 16, 2014

Chile prometió mar sin tocar el Tratado de 1904



— ¿Cómo evalúa la reciente gira internacional para explicar la demanda marítima?

— Era imprescindible que nuestros interlocutores, organismos internacionales, presidentes, conocieran en qué consiste la demanda y cuál es su fundamento. La mayor parte no tenía un conocimiento en detalle de la naturaleza jurídica de la demanda y esto era fundamental, porque tiende a pensarse que se trata de un problema de límites en el que Bolivia pide un territorio y, en consecuencia, se piensa que el centro de la demanda es nuestro Tratado internacional (1904) con Chile. Al explicarles que el Tratado no es la base, sino el diálogo con base en las ofertas incumplidas de Chile para ceder soberanía marítima, hay una sorpresa y se dan cuenta de que no es lo que dice Chile, ni que Bolivia quiere dinamitar (metafóricamente) el sistema internacional, basado en un orden de respeto a los tratados.

— Entonces, ¿cuál es la reacción de los interlocutores?

— Cuando ellos se dan cuenta de que Bolivia respeta los tratados y que no pretende poner en cuestión el orden internacional, referido a la legislación limítrofe, basado en esos tratados, se sorprenden muy positivamente y ése es un aspecto fundamental en el que hay que insistir, insistir e insistir sin detenerse.

— ¿Qué viajes nuevos se tiene previsto en adelante?

— En lo que queda del año, probablemente tendré un encuentro con uno o dos jefes de Estado de Sudamérica, además tengo agendada una reunión con el secretario general de la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), el expresidente colombiano Ernesto Samper, y ahí termina 2014, en el trabajo público. En 2015 hay que pensar en escenarios como Europa y Asia.

— ¿Qué países o escenarios internacionales visitó?

— A nivel bilateral estuve con jefes de Estado de Argentina, Ecuador y Paraguay; a nivel multilateral estuve en el Parlamento Andino, con el secretario general de la ONU (Ban Ki-moon), el secretario general de la OEA (el chileno José Miguel Insulza), embajadores de Asia, Europa, América Latina y el Caribe, y hemos entendido que es imprescindible una explicación en detalle de la demanda marítima.

— Tras las visitas realizadas, ¿percibió que la campaña de Chile tuvo efecto?

— Creo que esa explicación ha sido muy bien entendida, creo que he roto el prejuicio (que sostiene Chile) de que Bolivia pudiera estar basándose en un argumento peligroso para el orden internacional, y el objetivo —como siempre digo al comenzar mis reuniones con esas personas— es que no voy a pedir su adhesión, ni que al terminar se haga una declaración de respaldo a Bolivia, que, por cierto, hay países que al final terminan haciéndolo.

— Por tanto, ¿en qué se basan las explicaciones que ofrece?

— Que sepan en qué consiste la demanda, porque la estamos haciendo y, sobre todo, cuál es el fundamento jurídico; por lo general hay dos conclusiones: sorpresa, porque les parece muy interesante el enfoque boliviano y me doy cuenta de que ellos perciben que Bolivia no está poniendo en cuestión los tratados, ése es el tema más sensible, más delicado y —diría yo— con resultados positivos, es decir entienden que estamos buscando diálogo con base en ofertas incumplidas respecto a una salida soberana al mar.

— ¿Visitará Perú? ¿Cuál es la importancia histórica y estratégica de este viaje?

— La vinculación de Perú y Bolivia prehispánica, colonial y republicana es intensa y, en el pasado, vinculada a la Guerra del Pacífico (1879), ni qué decir: fueron países aliados contra Chile. Sin duda es una nación estratégica, es importante que Perú y la opinión pública internacional tenga plena conciencia de que la demanda boliviana no involucra a ese país, ni que sea un tercer actor en juego, porque sería distorsionar el proceso. No tenemos temas pendientes con ese país, ni nos debe nada con relación al tema del mar. Espero, con el presidente del Perú, Ollanta Humala, en el tiempo más corto posible, poder explicarle en detalle el tema y además ganar la confianza de que éste es un juicio contra el Estado chileno.

— ¿Cuándo sería el viaje?

— Probablemente el próximo año, porque nos estamos acercando al fin de año y hasta mediados de diciembre casi todos los países sudamericanos entramos en un periodo de receso, además el juicio va para largo; es un proceso de años, por tanto, hay que tomarlo con tranquilidad, con intensidad, con el ritmo adecuado, sin necesidad de precipitarse.

— En el Congreso peruano está pendiente la ratificación del Protocolo de Ilo. ¿Qué opina de esa demora? ¿Son señales para Bolivia?

— Hay un elemento que hay que definir, mi tarea es muy concreta y específica, ser el representante oficial de Bolivia para la causa marítima (...), de alguna manera hay una cierta vinculación con el tema de Ilo, pero esa es una decisión que deberá tomarse a nivel presidencial, entiendo que se está trabajando intensamente en una reunión bilateral del más alto nivel y será el mandatario de Bolivia (Evo Morales) que discuta con el del Perú (Ollanta Humala) el tema de Ilo.

— Se invitó al Presidente a liderar el grupo de naciones sin litoral. ¿Cuánto le puede beneficiar esto a Bolivia?

— El trabajo internacional del presidente Evo Morales tuvo un perfil extraordinariamente alto e importante; estuvo en la plenaria de la Asamblea de la ONU, presidió la Cumbre Indígena, la Cumbre del Cambio Climático, es presidente del G77+China y convirtió ese evento, en Santa Cruz, en una plataforma internacional de Bolivia. Estuvo en la reunión de los países sin litoral y fue invitado a presidir ese foro, lideró el grupo de sectores populares que se reunieron con el papa Francisco, en Roma.

— ¿Y cuál fue el nivel de influencia en esos escenarios?

— Hay dos factores que influyen a nivel internacional: el directo, en el que el Presidente habla del tema del mar; y el indirecto, en el que te das cuenta de que en el ámbito internacional existe un perfil de Bolivia —que representa el Presidente— muy alto. Uno encuentra a la mandataria de Chile, Michelle Bachelet, en Alemania, España o en alguna cumbre y esa administración tiene perfil alto; pero Bolivia tiene un perfil equivalente, en el que su Presidente tiene un reconocimiento internacional que le da un peso específico al país, y ese peso específico —políticamente— tiene una trascendencia muy significativa.

— ¿Esto puede influir en las decisiones de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) respecto a la demanda boliviana?

— Los jueces van a fallar en puro derecho, tienen que trabajar sobre los argumentos jurídicos, pero hay algo subjetivo: cualquier persona, corporación o grupo por muy serio que sea —y lo es el de la Corte— percibe el impacto, los elementos internacionales y percibe cómo se mueven los países que están en litigio. Ésa es una percepción que siempre está ahí y que no tiene como objetivo influir o pretender que los jueces tengan menor o mayor simpatía por lo que hace Bolivia, pero son aspectos de contexto político que debemos tomar siempre en cuenta.

— El juicio de fondo está paralizado. ¿Qué pasos siguen?

— Creemos —y parece ser parte de la estrategia de Chile— que aquí hay una posición de dilación, con el recurso de incompetencia hace una apuesta para alargar el proceso, porque no creemos que los argumentos de Chile tengan un fundamento mínimamente aceptable; y no lo tienen porque no están respondiendo a los argumentos esenciales que Bolivia plantea, que son los compromisos que un país hace a otro que generan una demanda exigible jurídicamente.

— ¿Este recurso que presentó Chile para buscar la incompetencia de la CIJ y la dilación que conlleva afecta la demanda que instauró Bolivia?

— Nuestra impresión es que este es un escollo que vamos a superar y llevará a un fallo —es nuestra esperanza— favorable a Bolivia. Es decir, creemos que la corte se declarará competente para llevar adelante el juicio, porque no vemos ningún elemento que justifique su incompetencia y eso hará que, resuelto este escollo, entremos a discutir el tema de fondo.

— ¿Cuáles son las siguientes actividades? ¿Hay plazos?

— Tras la presentación de la contraargumentación de Bolivia ante el recurso de Chile (el 7 de noviembre), después la Corte nos convocará a un alegato oral a ambos países, después del cual fallará sobre su competencia y entraremos, finalmente, a tocar el tema de fondo que es la memoria que Bolivia presentó en abril. Normalmente, la Corte Internacional no pone plazos cerrados, pero calculamos que el tema de la competencia de la Corte se lo debatirá y resolverá durante 2015.

— ¿Cuál es la base de la demanda que usted explica en los foros internacionales?

— Las ofertas incumplidas de Chile para entregar mar con soberanía a Bolivia es la base de la demanda; ése es el centro, la esencia de la demanda boliviana. Veía una declaración del expresidente (de Chile) Sebastián Piñera que decía: “no se puede considerar que conversaciones preliminares entre dos países, de buena fe, generen una obligación jurídica”. No fueron conversaciones preliminares, fueron promesas y compromisos, formales por escrito, firmadas por ministros de relaciones exteriores y embajadores de Chile, que en esa correspondencia oficial le dijeron a Bolivia, varias veces, que Chile estaba dispuesto a negociar formalmente con Bolivia para entregarle un acceso soberano al mar. Esto fue formalizado, escrito, y firmando a través de autoridades del Estado chileno y lo hicieron al margen del Tratado de 1904. Es más, incluso, en algunas de esas correspondencias, las autoridades chilenas decían expresamente que hicieron esas ofertas y plantearon esa negociación sin que eso implique que se modifique el Tratado de 1904, ni altere sus características.

— Si bien la demanda no toca el Tratado de 1904, alude a compromisos sobre eventuales modificaciones de límites como en 1975. ¿Chile usó eso para eludir el diálogo bilateral?

— La negociación de 1975, en la carta que el canciller Patricio Carvajal le envió a su homólogo boliviano dice claramente: “estamos dispuestos a negociar un corredor” en favor de Bolivia y explica los detalles, sin modificar en absoluto las características y condiciones del Tratado de 1904. Es decir, no es que la correspondencia aluda al Tratado, sino se lo hace sin que eso toque el Tratado.

— Se alista un video boliviano para responder la campaña que inició Chile respecto a la demanda boliviana. ¿Cómo surge esta iniciativa?

— El trabajo está casi terminado, hay que hacer algunos detalles de afinación. Nos reunimos poco después de la presentación del video de Chile (2 de octubre) con el vicepresidente Álvaro García Linera y el presidente Morales, sugerí explicar —en un material similar— las razones de la demanda boliviana y desmontar los elementos que no se ajustan a la verdad de los planteamientos de Chile. A ambos les pareció oportuno y necesario hacer el video y ahora está listo, pasó a consideración del Presidente y será él quien defina la fecha de la presentación.

— ¿Cuáles son las bases?

— Dos elementos son el corazón de este material audiovisual: uno, es explicar cuáles son las razones por las que Bolivia decidió hacer una demanda ante la Corte Internacional, además explicar las bases jurídicas del proceso y los objetivos. Otro punto es desmontar la argumentación de Chile de que el Tratado de 1904 es la base de nuestra demanda, esto es fundamental: explicarle a la comunidad internacional que no hay relación alguna entre el Tratado y nuestra demanda, y que no es verdad que Bolivia quiera poner en cuestión el orden internacional basado en los tratados internacionales que firman, a lo largo de la historia, voluntariamente los países.

— ¿Quiénes participarán en el video boliviano?

— Se trata de dejar que el propio video se exprese por sí mismo; si Chile escogió el camino de mostrar a sus exgobernantes y a la presidenta Bachelet para presentar su versión de la demanda, Bolivia escoge el camino de que sea el pueblo boliviano el que explique la razón de nuestro país para instaurar un juicio contra Chile. Este video tendrá una versión en castellano, en inglés y francés; se lo difundirá a través de las redes sociales y todos los mecanismos posibles para que sea conocido a nivel internacional. En nuestras futuras visitas llevaremos el Libro del Mar, además de este video.

— Con todo, ¿se puede reactivar el diálogo bilateral con la demanda de por medio?

— Dado que Bolivia ha escogido el camino de la Corte, el tema del mar deberá resolverse ahí, pero el Presidente dijo que Bolivia siempre está abierta al diálogo, porque existen otros temas bilaterales importantes que no pueden interrumpirse pese a la demanda.