A pesar de que entre Bolivia y Chile existen varios temas pendientes y de interés común como es el comercial, la demanda marítima debe priorizarse ya que la misma está en curso en la Corte Internacional de Justica de La Haya. Es lo más importante, según el análisis de dos investigadores que hablaron con EL DIARIO.
Por otro lado, el excanciller Armando Loaiza calificó como extremadamente positivo el encuentro entre ambos mandatarios.
El Gobierno boliviano debe actuar con mucha cautela ante el acercamiento de Chile dado el avance que se logró con la demanda marítima ante el Tribunal de La Haya, afirmó la experta en Derecho Internacional, Diana Borelli.
“Ya está el asunto marítimo en la Corte, ciertamente hay otros puntos que podrían hablarse pero como están las cosas es mejor que no porque tal vez en ese ínterin se cometen algún error que va a ser bien aprovechado por Chile”, afirmó.
Una vez que se solucione la cuestión marítima entre Bolivia y Chile, recién retomar los otros puntos de interés entre ambos países, agregó Borelli, ya que con este sorpresivo acercamiento Chile estaría “tentando a que no se siga con la demanda, están viendo diferentes posibilidades (…) Que se regrese a tocar los otros puntos de la agenda, puede darse, pero también entiendo que como principal está el punto de la cuestión marítima”, porque actualmente “Chile es el más afligido, nosotros no”.
De su lado, el investigador Víctor Hugo Chávez afirmó que en estos momentos y por el avance y trabajo que se ha realizado desde el Gobierno, lo más importante es la demanda marítima que sigue Bolivia en la CIJ de la Haya y el tema de la agenda bilateral llega a un segundo plano porque de lo contrario debilitaría la misma demanda.
“Sería contradictorio de que se pretenda retomar la agenda de los trece puntos y eso sería señal de que Bolivia tiene un mecanismo de reposición que no pasa precisamente por La Haya”, afirmó.
En tanto no se solucione la demanda marítima en La Haya no se pueden negociar de forma paralela los otros doce puntos porque el motivo de interponer una demanda internacional fue justamente el desinterés de Chile para solucionar este tema.
En tanto, para el excanciller Armando Loaiza el acercamiento entre Morales y Bachelet es “extremadamente positivo” ya que la iniciativa ayudaría a superar el “clima enrarecido” entre ambos estados que se suscitó a raíz de la controversia presentada en La Haya.
“Para mí es extremadamente positivo que ambos países a través de sus más altos mandatarios hayan decidido retomar un impulso a las relaciones y dejar de lado esta tensa y crispada atmósfera que estaba rodeando la relación boliviana–chilena”, afirmó el diplomático.
“Hacer diplomacia” es la tarea que ambos jefes de estado cumplieron en San José de Costa Rica y que la misma debe ser aprovechada para volver a retomar los otros temas consignados en la agenda de los 13 puntos elaborada en 2006.
En relación a la demanda marítima, Loaiza afirmó que este tema debe seguir su curso en los tribunales internacionales.
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