El procurador general del Estado, Héctor Arce, afirmó ayer que no existe una figura legal para paralizar la demanda marítima en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), tal como planteó el agente de Chile, José Miguel Insulza, quien dijo que por el clima de “exasperación” entre Bolivia y Chile se debe informar a la CIJ que “no es el mejor momento para resolver” el caso de la demanda marítima.
“Este comentario de (José Miguel) Insulza, no corresponde y no existe ninguna figura procesal jurídica que permita paralizar un proceso justamente por las razones que él ha mencionado. La demanda va a continuar y sobre eso se abrirá una segunda ronda de escritos. Finalmente, se pasará a la fase oral y ahí se dictará una sentencia justa”, consideró la autoridad.
El Procurador dijo que la intención de Bolivia es entablar un “diálogo sincero” con Chile, para buscar una alternativa que solucione su mediterraneidad, pedido que justamente se encuentra en la demanda marítima: diálogo.
Por otra parte, Arce rechazó los exabruptos de la alcaldesa de la ciudad chilena de Antofagasta, Karen Rojo, quien ayer mediante un video difundido en las redes sociales deploró la actitud del presidente Evo Morales en las relaciones bilaterales entre Bolivia y Chile y le pidió que se callara.
“Ayer salió una alcaldesa de Chile que no es una autoridad nacional con un exabrupto que lo rechazamos categóricamente y profundamente, nadie puede mandar a callar al Presidente (Evo Morales), que más bien está abogando por el derecho internacional por la paz y la identidad y derecho de los pueblos”, afirmó Arce.
La tensión entre Bolivia y Chile se reavivó, luego que Morales denunció la instalación de una base militar chilena a 15 kilómetros de la línea fronteriza, más exactamente en la comunidad denominada Cariquima, hecho que viola convenios internacionales que establecen 50 kilómetros para la ubicación de dichas bases.
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