Con la renuncia de Felipe Bulnes como agente de Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, y la inmediata designación en ese cargo de José Miguel Insulza, ese país inició una nueva etapa en torno a la demanda marítima que le interpuso Bolivia.
"Hoy es el inicio de la segunda fase de la defensa en este proceso, ahora se abordarán los aspectos de fondo que contiene la demanda de Bolivia”, expresó el 23 de noviembre la presidenta chilena, Michelle Bachelet, a tiempo de encargar el proceso jurídico al nuevo agente.
En un reportaje publicado el jueves 24 de diciembre por la revista Qué pasa, de Chile, se revelan características de cómo se pretende encaminar esta nueva fase desde La Moneda. Dicha nota periodística titula El plan Insulza y muestra al menos cuatro planteamientos de cómo se encarará esta etapa.
Estos son: redactar una contramemoria directa, menos judicial y más política; establecer un plan de soberanía en el norte chileno y a la vez mejorar los servicios para los países vecinos; programar una reunión trascendental para enero; y buscar posicionar la idea de que la demanda Bolivia no tiene respaldo en el mundo.
Sin respaldo internacional
Como uno de los ejes de acción, Insulza sostuvo que la demanda boliviana en Europa no existe. "No es un tema que esté en la agenda de ninguna cancillería europea, ni asiática ni africana ni de ninguna parte”, aseguró el nuevo agente.
No obstante, la canciller alemana Angela Merkel y el presidente francés, Francois Hollande, mencionaron -luego de reunirse por separado con el presidente Evo Morales la primera semana de noviembre- su apoyo a que ambos estados dialoguen para buscar una solución.
Ante esas dos aseveraciones, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, salió al paso casi de inmediato para mencionar que Merkel y Hollande se sientieron incómodos por "la presión boliviana de conseguir un endoso” a la demanda.
Contramemoria más política
Entre las acciones concretas de cara al 25 de julio de 2016 -plazo fatal para que Chile entregue su contramemoria- Insulza planifica elaborar un documento más conciso, el cual ahonde más en los argumentos políticos que en los de tipo estrictamente jurídico, según el mencionado reportaje.
Ante este panorama, Muñoz confesó que en un principio llegó "con muchas ínfulas” de querer entregarla a fines de mayo pero que si se lo hace hasta antes del plazo establecido estará "satisfecho”.
"Ojalá podamos hacerlo antes porque en realidad la memoria boliviana fue presentada hace bastante tiempo; mientras antes podamos presentarla, mejor, pero hay mucho trabajo preciso que hacer. Tiene que ser precisa en las citas, no hay que equivocarse, hay que ser cuidadoso”, afirmó Muñoz.
Entretanto, el vicecanciller Juan Carlos Alurralde aseguró esta semana que la memoria presentada por el país es "sólida, técnica y jurídicamente solvente”. Esta autoridad hizo referencia al documento elaborado por el equipo de juristas de Bolivia, y presentado el 15 de abril de 2014 -casi un año después de plantear la demanda ante ese tribunal- donde se solicita que Chile negocie una salida soberana al mar tras que el país perdiera su cualidad marítima en el siglo XIX.
Soberanía y política vecinal
Dentro de lo planificado por el actual "comandante de la demanda chilena” está sentar soberanía en el norte de su territorio. Además, Insulza es consciente de que "tiene pendiente una política vecinal”. Por eso, es partidario -refleja Qué Pasa- de mejorar la infraestructura y servicios que Chile ofrece a sus vecinos (Perú, Bolivia y Argentina), como carreteras, puertos y aduanas.
Tras el último paro aduanero de noviembre en el vecino país, el presidente de la Cámara de Transporte Pesado de la ciudad de El Alto, Gustavo Rivadeneira, informó el miércoles 16 de diciembre que ese sector perdió este año más de 36 millones de dólares por los constantes paros de los trabajadores de ese rubro en Chile.
En una entrevista con Página Siete, el viceministro de Comercio Exterior, Clarems Endara, mencionó que más del 80% de la carga boliviana para exportación sale por puertos chilenos.
"Aunque hay que señalar que hay dificultades respecto a las facilidades que se otorga a Bolivia en Arica, que deriva en perjuicios millonarios que se puede ir percibiendo cada vez que existe algún problema administrativo con cola de 1.000 camiones de dos o tres días. Eso hace que no se pueda aprovechar todo lo establecido en un convenio bilateral con Chile”, precisó Endara.
Reunión en enero
Como parte de las actividades de este año que inicia, el equipo jurídico chileno sostendrá una reunión con Insulza y Muñoz en París el 26 de enero. Tres semanas después, el presidente Evo Morales y el team Bolivia podrían reunirse en Santa Cruz para delimitar las acciones para esta segunda fase de la demanda, una vez la CIJ se declaró competente para decidir sobre ésta.
Roxana Forteza Internacionalista
"Por la vía judicial, Bolivia tiene mucho asidero”
En alguno de los ítems parece algo conciliador, en el tema de mejora de servicios que evidentemente son malos; eso sería interesante. Por otro lado, veo que Chile ha avanzado muy poco en conseguir adeptos hacia la posición chilena y vienen trabajando en eso. No ha habido nadie que se pronuncie como lo hacen con Bolivia.
Con Bolivia sí hay pronunciamientos de adhesión a la causa, que obviamente no van más allá de eso. Ningún país evidentemente ha cambiado su agenda respecto a la causa marítima boliviana. Pero de que sí ha generado una opinión sobre el tema y que otros países simpatizan con la causa boliviana, es evidente. Creo que el señor Insulza no ha podido conseguir esos simpatizantes con la causa chilena.
El tema de la frontera norte pasa por un tema de narcotráfico, más que por el tema marítimo. Bolivia está percibida por los países vecinos como un país narcotraficante.
Sobre la contramemoria habría que verla. Lo que pasa es que por la vía judicial Bolivia tiene mucho asidero y eso es lo que ha preocupado a Chile. Como Chile legalmente no tiene peso, tiene que recurrir a otras artimañas.
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